RSC.- La Comisión Europea pide obligar por ley a los fabricantes de coches a reducir las emisiones de CO2

Actualizado: miércoles, 7 febrero 2007 17:17

El comisario de Industria dice que España y Reino Unido podrían ser los países más perjudicados por la nueva norma


MADRID, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea presentó hoy, tras semanas de polémica, su propuesta para obligar por ley a reducir las emisiones de CO2 de los coches, que ha sido suavizada para reducir el impacto sobre la industria del automóvil. El vicepresidente de la Comisión y responsable de Industria, Günter Verheugen, aseguró que España y Reino Unido podrían ser los países más perjudicados por el aumento de costes que producirá esta norma al estar especializados en vehículos pequeños y medianos.

El Ejecutivo comunitario mantiene el objetivo global de emisiones de 120 gramos por kilómetro en 2012, cifra que supone una reducción del 25% respecto al nivel actual. No obstante, la carga se reparte entre los fabricantes de coches, a los que se fija como límite 130 gramos por kilómetro, en lugar de los 163 gramos actuales. Otras medidas complementarias, como el uso de biocarburantes, o mejoras en los neumáticos y los sistemas de aire acondicionado para incrementar la eficiencia energética de los vehículos, deberán garantizar, también por ley, una disminución adicional de 10 gramos por kilómetro.

Verheugen admitió que la nueva legislación provocará un aumento en los costes de fabricación de nuevos vehículos que no quiso cifrar, pero dijo que quedará contrarrestada con los ahorros en carburante gracias a su mayor eficiencia.

Asimismo, aseguró que la nueva norma no supondrá un gran problema para los fabricantes alemanes, que podrán asumir el coste, sino sobre todo para los especializados en vehículos pequeños y medianos, y mencionó los casos de Reino Unido y España, donde dijo que hay riesgo de nuevas "reestructuraciones" que el Ejecutivo comunitario trata de evitar.

"Los automóviles que se fabrican en España corresponden a estas categorías. Las antiguas ventajas de España en tanto que país que ofrecía una mano de obra barata ya no son tales, y hoy España sufre una desventaja en la competencia porque se encuentra en una situación periférica con respecto a este mercado europeo", explicó el comisario de Industria.

"Ahora la cuestión es saber cómo conseguir que esa enorme presión de los precios que sufren los fabricantes de pequeños y medianos automóviles no les lleve a plantearse cerrar instalaciones de producción y llevarlas a otro lugar. Eso es algo que afectaría especialmente a los dos países (España y Reino Unido) y es lo que pretendemos evitar", recalcó Verheugen.

Explicó que cuando se presente la propuesta legislativa definitiva, a finales de 2007, habrá "objetivos diferenciados" de reducción de CO2 por categorías y tipos de vehículos para que la propuesta sea "socialmente sostenible" y se garantice la producción de vehículos en territorio comunitario.

En todo caso, subrayó que el plan de Bruselas para reducir las emisiones de CO2 de los coches situará a Europa en una situación "puntera" frente a Japón y Estados Unidos y permitirá a la industria "fabricar los automóviles mejores, más seguros y más limpios".