RSC.- La Confederación sindical CLC de Camboya, denuncia la situación de los sindicatos independientes en el país

Actualizado: lunes, 8 octubre 2007 16:58

Su responsable aboga por comunicar las amenazas a sus interlocutores pero también a la comunidad internacional para que todos las conozcan


MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Confederación sindical CLC de Camboya, Ath Thorn, denunció recientemente en Bruselas la situación de los sindicatos independientes en su país, en la que que "sus militantes son víctimas de todas las armas del arsenal de la represión antisindical que practican los empleadores y las autoridades".

En este sentido, Thorn se refirió a algunos de los obstáculos con los que se enfrentan los sindicatos independientes de Camboya: la injerencia del gobierno y de los empleadores, que procuran crear sindicatos 'amarillos' para "embaucar" a los trabajadores y crear confusión; la falta de seguridad de los empleados que se afilian a sindicatos independientes --"en los últimos tres años fueron asesinados tres sindicalistas sin que se investigaran los hechos", aseguró--; y el limitado nivel de instrucción de estas personas.

Asimismo, el presidente de la Confederación Sindical explicó el problema que suponen los contratos de empleo de corta duración. "Cuando los trabajadores tienen únicamente contratos de uno o dos meses, nos resulta muy difícil conseguir afiliarlos. Además, algunos empleadores 'castigan' a los militantes sindicales imponiéndoles ese tipo de contrato", añadió.

Thorn denunció además la presión que ejercen los empresarios sobre los familiares de los sindicalistas mediante la denegación de ascensos o la práctica de descuentos salariales, así como las amenazas y sobornos a los delegados sindicales. "Los empleadores colocan a los trabajadores en situaciones desesperadas y después intentan comprarlos", aseveró. Sin embargo, "la legislación laboral camboyana estipula que esa manera de actuar es ilegal", afirmó.

"Los empleadores van violando los derechos sindicales de manera progresiva" añadió el presidente. Asimismo, habló sobre los asesinatos y las violentas agresiones que sufren los sindicalistas. "Les contamos las amenazas a nuestros interlocutores de Camboya pero también a la comunidad internacional. Es necesario que todos estén al corriente de los problemas que tenemos en materia de seguridad", remarcó.

AMENAZAS Y PRESIONES.

Además, Thorn explicó que él mismo fue amenazado en las negociaciones que se llevaban a cabo en la empresa de confección Winner Garments Ltd. "Nos enfrentamos con un sindicato 'amarillo', denominado 'Khmer Youth Trade Union', y durante las negociaciones, su dirigente actuaba como si estuviera representando al empleador o al gobierno y no a los trabajadores. Amenazó a nuestros negociadores. Les dio un CD sobre sindicatos a los que el gobierno ataca", explicó.

En este sentido, el entrevistado dijo que en las negociaciones que se llevaron a cabo en 2006 sobre el salario mínimo, sólo consiguieron que se aumentara cinco dólares. "El hecho de que el aumento que conseguimos haya sido tan pequeño se lo debemos a los sindicatos 'amarillos': no colaboraron con nosotros, sino que más bien lo hicieron con el Ministerio de Trabajo, a fin de interrumpir las negociaciones", puntualizó Thorn.

Finalamente, el responsable del CLC recordó que "una persona que trabaja en una ciudad y que tiene que enviar dinero a sus familiares que están en el campo tiene que ganar como mínimo 82 dólares --unos 58 euros-- mensuales".