RSC.-FAO muestra su "preocupación" por la sobreexplotación de los recursos pesqueros y aboga por reforzar la ordenación

Actualizado: lunes, 5 marzo 2007 15:31

Un Informe de la FAO denuncia que el control de las capturas en alta mar es "inadecuado"


MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -

La sobreexplotación de los recursos pesqueros ha permanecido estable durante los últimos 15 años, sin embargo, según un informe hecho público hoy por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el estado de determinadas especies es motivo de "seria preocupación" por lo que aboga por reforzar la ordenación de la pesca en aguas internacionales.

Según el Informe 'El Estado mundial de la pesca y la acuicultura' (SOFIA, por sus siglas en inglés), de todas las especies de peces controladas por la FAO, el 25% están sobre explotadas, agotadas (7%) o recuperándose tras una fase de agotamiento (1%).

El estudio recoge que el 52% de los recursos se encuentra plenamente explotado, lo que significa que han alcanzado o están cerca de su nivel máximo de producción sostenible. En conjunto, la producción mundial de pescado suma 141,6 millones de toneladas anuales. De ellas el 75% se destina directamente al consumo humano, mientras que el resto se utiliza para productos no alimentarios.

La acuicultura continúa siendo por tanto, el sector alimentario de más rápido crecimiento en el mundo, con una producción de casi 50 millones de toneladas anuales, frente al estancamiento de la pesca de captura. Mientras en 1980 tan sólo el 9% del pescado para el consumo humano procedía de la piscicultura, hoy en día este porcentaje alcanza el 43%.

Asimismo, el Informe señala que el pescado es el alimento que más se comercializa en el mundo. El comercio mundial ha alcanzado un nivel récord incrementando las exportaciones un 23% respecto al año 2000.

Aunque el estudio recoge que las cifras han permanecido estables durante los últimos 15 años, el estado actual de las poblaciones de algunas especies que se pescan total o parcialmente en zonas de alta mar --fuera de las jurisdicciones nacionales-- es motivo de "gran preocupación". En concreto, se trata de las denominadas especies transzonales que atraviesan regularmente las fronteras marítimas nacionales y las aguas internacionales, así como los tiburones oceánicos altamente migratorios.

Más de la mitad de los tiburones migratorios y el 66% de las poblaciones de peces transzonales y de alta mar se encuentran sobre explotados o agotados, según recoge el Informe. Aquí se incluyen especies como la merluza blanca, el bacalao del Atlántico, el mero, el pez rojo anaranjados, el tiburón elefante y el atún rojo.

Según el director general adjunto de la FAO al frente del Departamento de Pesca, Ichiro Nomura, aunque estas especies representan tan sólo una pequeña parte de los recursos pesqueros mundiales, "son un indicador clave del estado de gran parte del ecosistema oceánico".

CONTROL "INADECUADO"

El Informe SOFIA indica además que el control de las capturas en alta mar es "inadecuado". Esta situación hace muy difícil evaluar "con exactitud" el estado de determinadas especies y gestionarlas de forma responsable.

Por otra parte, el documento recoge que el porcentaje de las zonas que se encuentran explotadas al máximo de su nivel sostenible o de forma excesiva varía mucho de una zona a otra. Así, entre las zonas más delicadas se encuentran el Atlántico sudoriental, el Pacífico sudoriental, el Atlántico nororiental y los caladeros de pesca en alta mar del atún en los océanos Atlántico e Índico. En las áreas mencionadas, la proporción de especies en la categoría de sobre explotadas, agotadas o en fase de recuperación varía entre el 46% y el 66% del total.

Nomura señaló que esta tendencia "confirma que el potencial de captura en los océanos ha alcanzado su techo máximo", lo que demuestra "la necesidad de una ordenación de la pesca más prudente y eficaz para lograr recuperar unas poblaciones de peces agotadas y evitar el declive de las que se encuentran explotadas al límite, o cerca de su potencial".

El Informe defiende también la necesidad de reforzar las Organizaciones Regionales de Ordenación Pesquera (OROP), instituciones multilaterales creadas por los gobiernos para promover la cooperación internacional en materia de ordenación pesquera.

Estas organizaciones representan la única forma realista de gestionar la explotación de recursos pesqueros en caso de poblaciones de peces compartidas o transzonales que se desplazan entre diversas zonas de jurisdicción nacional, entre estas zonas y alta mar o exclusivamente en aguas internacionales, según el estudio.

FALTA DE COMPROMISO POLITICO

A pesar de los esfuerzos para mejorar su capacidad de gestión en los últimos años, "la falta de compromiso político por parte de los miembros de algunas OROP y las posturas intransigentes han obstaculizado e incluso bloqueado los esfuerzos de alguna de estas organizaciones para afrontar el desafío de la conservación y gestión adecuada de los recursos", denuncia el documento.

Por todo ello, es imprescindible "reforzar las OROP para conservar y gestionar las reservas de forma más eficaz", principal desafío al que se enfrenta la ordenación de la pesca a nivel internacional, según recoge el informe.

Por otra parte, entre el 5 y el 9 de marzo tendrá lugar la XXVII reunión de la Comisión Pesquera de la FAO donde se debatirá entorno a la reforma de las OROP. El encuentro abordará otros temas como el enfoque ecológico de la pesca y la acuicultura, la pesca en alta mar, las áreas marinas protegidas, los riesgos derivados por la pérdida o el abandono de aparejos de pesca y la lucha contra la pesca ilegal.