RSC.- Francia creará una carta de obligaciones para regular las prácticas en empresas y evitar los "abusos"

Actualizado: lunes, 16 enero 2006 17:15


PARIS, 16 Ene. (Del corresponsal de EUROPA PRESS, Javier Gómez Muñoz) -

El Gobierno francés creará una "carta de obligaciones" para evitar los "abusos" que se producen con los periodos de prácticas en empresas de muchos jóvenes recién licenciados o que prosiguen sus estudios. A partir de ahora, los jóvenes con contratos de prácticas de más de tres meses deberán percibir obligatoriamente un salario mensual.

"Hay que poner fin a las injusticias creadas por el sistema actual, que permite largos periodos de prácticas no remuneradas", declaró hoy el primer ministro, Dominique de Villepin.

Además del salario de 360 euros mensuales que recibirán todos los jóvenes en prácticas cuando el periodo de estancia en la empresa sea mayor de tres meses, estos contratos figurarán dentro de su "antiguëdad profesional" como trabajadores. "Las prácticas deben formar parte del periodo de consolidación del empleo", agregó el ministro de Asuntos Sociales, Jean Louis Borloo.

Villepin explicó las nuevas medidas en una conferencia de prensa centrada sobre la lucha del Gobierno por reducir el paro entre los jóvenes y fomentar la actividad laboral en Francia. El primer ministro tachó de "inaceptable" el casi 23% de paro que registra Francia entre los menores de 26 años. "El paro es la gran cuestión francesa", reconoció, "y los jóvenes son las primeras víctimas".

Los jóvenes tardan, en Francia, entre 8 y 11 años en encontrar un empleo estable y el paro entre quienes tienen al menos cuatro cursos universitarios es del 21%. "El diploma ya no es garantía para encontrar un trabajo", reconoció Villepin.

El primer ministro anunció igualmente la creación de un nuevo tipo de contrato fijo flexible, llamado 'Contrato Primera Oportunidad' (CPE), concebido especialmente para reducir el desempleo entre los parados jóvenes.

CAMBIO DE CONCEPCION

Este tipo de convenios es una adaptación de los nuevos contratos indefinidos (CNE), con un periodo de prueba de dos años, puestos en marcha por el Ejecutivo galo hace seis meses. Durante esos dos años, las empresas están exoneradas de tasas por esos trabajadores y pueden despedirlos sin coste alguno. Los CNE sólo eran válidos en las pymes, mientras los CPE lo serán en todas las empresas.

Villepin asumió que "ha quedado demostrado que la reducción del tiempo de trabajo para compartir empleo ha fracasado" y que las reducciones de impuestos a las empresas con el mismo fin "han sido útiles pero insuficientes". "Por tanto", manifestó, "es necesario cambiar toda la concepción del trabajo en Francia".

En este sentido, aunque sin derogar la jornada laboral semanal de 35 horas, el Gobierno prosigue tomando medidas para aumentar la flexibilidad en el tiempo de trabajo "para que quienes quieran trabajar más puedan hacerlo". Villepin avanzó hoy que habrá una reducción de impuestos sobre las horas suplementarias que quieran hacer los trabajadores, antes prohhibidas por la ley de 35 horas.

Además, el jefe del Ejecutivo propuso que las empresas tengan 500.000 aprendices en 2009, y propuso que el 3% de las plantillas de las empresas de más de 200 trabajadores en esa fecha sean jóvenes en formación.

A juicio de Villepin, "en Francia hay una insuficiente relación entre la formación y la preparación para el empleo" y "un diploma ya no es garantía para un trabajo". En este sentido, el Gobierno pretende desarrollar la formación profesional para los jóvenes con menos preparación (entre los jóvenes sin ninguna formación, el paro es del 40%), y conseguir su inclusión en el mercado laboral mediante el aprendizaje reglado.