RSC.- Fundación Telefónica y la Universidad de Comillas realizan un estudio sobre el acceso a nuevas tecnologías en ONG

Actualizado: miércoles, 4 enero 2006 14:16

MADRID, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -

De todas las ONG que luchan contra la exclusión social necesitan más apoyo tecnológico aquellas que trabajan con gitanos, personas sin hogar, drogodependientes y víctimas de violencia de género, según se desprende de un análisis realizado por la Fundación Telefónica y la Universidad Pontificia de Comillas. El estudio se basa en la idea de que las nuevas tecnologías ayudan a las comunidades con riesgo de exclusión social a salir del aislamiento, de la incomunicación y del 'gueto'.

El estudio 'Nuevas Tecnologías y exclusión social', que analiza la brecha digital que existe en las ONG que luchan contra la exclusión, analiza los frenos que existen para que la tecnología se convierta en un factor clave para la inserción social.

Asimismo, el análisis subraya que las nuevas tecnologías pueden ayudar principalmente a recuperar el reconocimiento social del que carecen estas personas ofreciéndoles la posibilidad de interactuar con otras personas, estableciendo comunicación con la familia o conociendo gente.

Estos frenos son, principalmente, la falta de formación en informática de las personas que trabajan en las organizaciones que luchan contra la exclusión social y la falta de programas informáticos y servicios web adaptados a las necesidades de las personas en riesgo de exclusión.

Para superar esos frenos existe una base importante, como el número de ordenadores y de usuarios que acceden a Internet desde estas organizaciones, incluidos las propias personas en riesgo de exclusión.

El estudio, dirigido por el sociólogo Pedro Cabrera, detecta que más de la mitad de las ONG consultadas no han recibido ningún tipo de ayuda para incorporar nuevas tecnologías y que existen cuatro tipo de entidades particularmente mal equipadas: las que trabajan con gitanos, con personas pobres, con presos y con personas sin hogar.

Los autores del estudio consideran que estos cuatro tipos de entidades, junto con las de mujeres víctimas de violencia de género, necesitan un apoyo especial para la introducción de las nuevas tecnologías en su trabajo.

SOLUCIONES

Por otro lado, el estudio ofrece una propuesta concreta para superar la brecha digital que sufren este tipo de organizaciones. "Un plan de formación para estas entidades tendría como objetivo que ellas mismas se convirtiesen en centros de formación para las personas en situación de exclusión social", señala el estudio.

Además, se aprovecharía el uso que las personas en situación de exclusión ya hacen de Internet, y que está principalmente relacionado con el ocio, la búsqueda de empleo y la obtención de información.

De forma complementaria, los autores del estudio proponen la elaboración de publicaciones didácticas y sencillas dirigidas tanto a formadores como a usuarios finales. Las páginas web relacionadas con la inserción social todavía no tienen tanta difusión como cabría esperar. En las encuestas realizadas para el estudio, las cinco webs más conocidas son Cáritas, HacesFalta, Cruz Roja, Canal Solidario y Risolidaria.

Por otro lado, indican que el teléfono móvil puede ser un "aliado inseparable", incluso entre las personas con menos recursos económicos. "Incluso aquéllos que carecen de lo más básico, en muchas ocasiones cuentan con un teléfono móvil", concluye.