Actualizado 09/02/2007 13:41

RSC.- El Grupo murciano Rostoy obtiene la Certificación de AENOR en 'BRS' e 'IFS' de Calidad y Seguridad Alimentaria


MADRID, 9 Feb. (EUROPA PRESS) -

La empresa murciana Grupo Rostoy, dedicada al sector agroalimentario, ha obtenido las Certificaciones 'BRS' e 'IFS' de Seguridad y Calidad Alimentaria concedidas por la Asociación Española de Normalización (AENOR) que le obligan a un compromiso medioambiental y fijan férreos controles sanitarios y protocolos de distribución de los productos.

"Estas normativas obligan a la empresa a controlar todos los detalles: los relativos a la selección de la materia prima, recepción, tratamiento, transformación, envasado, almacenaje y comercialización", explicó en este sentido la directora de Calidad de Rostoy, Ana Guillén; es decir, "controlar cada uno de los pasos en la cadena de producción y distribución, lo que permite conocer dónde se ha vendido un lote, cuándo y el número de envases, por ejemplo", agregó.

Se trata de dos normativas "muy rigurosas", según la compañía, en materia de Seguridad y Calidad Alimentaria. El origen de la Certificación 'BRC' nace de las exigentes leyes de Reino Unido para regular los procesos de los proveedores; y la 'IFS' proviene conjuntamente de Francia y Alemania --aunque otros países como Países Bajos, Bélgica, Polonia, Italia o Austria también han apostado por este modelo--.

Según el Grupo, obtener dichas certificaciones ha supuesto adaptar los procesos productivos y protocolos a las rigurosas normativas, lo que ha conllevado "un gran esfuerzo y una inversión por parte del Grupo Rostoy", pero, a la vez, "tiene muchos beneficios y ventajas, ya que permitirá acceder a nuevos mercados, al ser dichas certificaciones una garantía de calidad y seguridad alimentaria, de las más prestigiosas que existen actualmente", afirma su presidente, Manuel Sánchez.

El Grupo Rostoy lleva casi 50 años dedicado a la transformación de frutas y hortalizas para la elaboración de zumos, néctares y horchata de almendra. Desde su fundación en 1958, la empresa murciana ha continuado la tradición industrial de la región de Murcia aprovechando la gran capacidad de producción hortofrutícola que ofrece esta tierra para elaborar productos de gran calidad.

Su sede social está ubicada en la pedanía murciana de Casillas, donde cuenta con tres plantas de fabricación, envasado y almacén con el equipamiento más avanzado para la recepción, tratamiento, transformación, envasado y almacenaje del producto.