Actualizado 08/01/2007 17:53

RSC.- Oceana denuncia la venta en España de cientos de toneladas de pez espada capturados ilegalmente en Marruecos

El 98% de las capturas se venden en España, prácticamente en su totalidad a través de empresas españolas con base en Vigo


MADRID, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -

La organización de defensa del mar Oceana denunció hoy, a través de un nuevo Informe, la venta en España de cientos de toneladas de pez espada capturado en Marruecos, a través de la actividad de pesqueros marroquíes que actúan en el Mar de Alborán y el Estrecho de Gibraltar con redes prohibidas por Naciones Unidas.

A pesar de que el uso de estas redes para la captura de especies altamente migratorias en el Mediterráneo está prohibido desde 2005 por la Comisión General de Pesca del Mediterráneo (CGPM), una flota de pesqueros marroquíes, que Oceana estima en no menos de 150 barcos, "sigue utilizando este destructivo arte de pesca en el Mar de Alborán y en el Estrecho de Gibraltar, calando redes de hasta 12 kilómetros de longitud", matiza la organización.

Toneladas de pez espada producto de esta pesca ilegal son comercializadas en España por empresas ubicadas en Vigo, que lo distribuyen en el mercado nacional y lo reexportan a Italia. Así lo pone de manifiesto este nuevo Informe publicado esta semana por Oceana, basado en las investigaciones llevadas a cabo hace unos meses.

Durante el pasado mes de agosto el catamarán de investigación Oceana Ranger navegó por las aguas del Mar de Alborán para detectar, filmar y fotografiar la presencia de rederos de deriva marroquíes. Científicos de la organización visitaron también los puertos de Nador, Alhucemas y Tánger para evaluar la magnitud de la flota marroquí dedicada a esta pesquería y estimar las cantidades de red de deriva almacenadas en esos puertos.

Por otra parte, Oceana llevó a cabo un seguimiento de los canales de comercialización del pez espada capturado por esta flota que practica la pesca pirata, técnicamente denominada 'Ilegal, no Declarada y no Reglamentada (IUU, por sus siglas en inglés)'.

CONCLUSIONES DE LA INVESTIGACION

Las conclusiones de la investigación, publicadas esta semana bajo el nombre 'El uso de redes de deriva por la flota marroquí', forman parte del tercero de una serie de documentos que analizan el uso de redes prohibidas en el Mediterráneo. Los dos Informes previos abordaban las operaciones de las flotas ilegales italiana y francesa.

Entre los datos más llamativos de este último Informe destaca el hecho de que solamente el 2% de las capturas de pez espada realizadas por la flota marroquí se consume en ese país, y que el 98% se dedica a la exportación, prácticamente en su totalidad a empresas españolas con base en Vigo.

Una estimación basada en los datos de capturas y exportaciones indica que, solamente en 2004, al menos 1.150 toneladas de pez espada capturadas ilegalmente pasaron por los grandes mercados españoles de distribución para ser reexportadas en su mayoría a Italia. De éstas, unas 230 toneladas habrían sido comercializadas en España.

Además de la prohibición del uso de estas redes por organismos internacionales el uso de redes de deriva para la captura de determinadas especies altamente migratorias --como pez espada o el atún rojo--, está prohibido por un Reglamento de la Unión Europea aprobado en 1997 y posteriormente modificado en 1998.

España se adelantó a esta medida y hace más de una década aplicó la moratoria decretada por la ONU prohibiendo el uso de las redes de deriva a barcos españoles. Tras algunos años de tolerancia hacia una flota ilegal que operaba desde el puerto de Algeciras, finalmente el Gobierno español eliminó totalmente las redes de deriva, convirtiéndose en el primer país de la UE en tomar esta medida.

En palabras del director de Oceana para Europa, Xavier Pastor, uno de los autores del Informe, "es irónico que el mismo país que resultó ejemplar al prohibir finalmente las redes de deriva potencie ahora el uso de las mismas por una flota ilegal marroquí, permitiendo la comercialización de pez espada capturado con técnicas de pesca pirata a través de España".

A su juicio, la actuación de la flota marroquí de rederos de deriva compite directamente con la de flota española de palangre, parte de la cual faena en Alborán con un arte legal, pero menos efectivo, desde los puertos de Almería y Murcia. "Los palangreros españoles están indignados por la tolerancia que existe hacia la flota ilegal marroquí, y han llegado a amenazar con adoptar ellos mismos la utilización de las redes prohibidas", agrega Pastor.

La utilización de redes de deriva no solamente puede provocar una sobreexplotación del stock de pez espada, sino que produce capturas accidentales de miles de cetáceos y tiburones. Datos citados en el Informe evalúan en más de 17.000 el número de delfines listados y comunes víctimas de las redes de deriva marroquíes, así como más de 31.000 ejemplares de tres especies de tiburones (pez zorro, marrajo y tintorera). Las redes de deriva capturan también decenas de miles de peces luna, uno de los depredadores más importantes de las medusas.

El informe de Oceana explica también cómo las redes de deriva marroquíes son colocadas masivamente y de forma habitual en las proximidades del dispositivo de separación del Tráfico Marítimo del Estrecho de Gibraltar.

Tanto la Unión Europea como Estados Unidos están en conversaciones con el Gobierno marroquí para que haga efectiva la prohibición del uso de redes de deriva a su flota. La Unión Europea destinará 1,2 millones de euros anuales de subvención a Marruecos, dentro del marco del nuevo acuerdo de pesca, para contribuir a la reconversión de esta flota.

Sin embargo, la UE "sigue satisfaciendo la demanda de sus mercados con pez espada capturado ilegalmente a través de canales de importación mayoritariamente españoles, fomentando de esta forma la continuidad de un arte de pesca condenado por la comunidad internacional de forma unánime", concluye Pastor.