El ex ministro del PP denuncia que el reparto de Barajas genera un "abuso de posición dominante" a favor de Iberia
MADRID, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
El ex ministro de Fomento durante la etapa de gobierno del PP Francisco Álvarez-Cascos considera que la asignación de espacios en el aeropuerto de Madrid-Barajas decretada por la actual dirección de AENA representa una "gravísima cacicada con visos de presunta prevaricación", al ceder el "uso exclusivo" de la nueva terminal T4 a "una sola empresa privada", en alusión a Iberia.
"Los actuales gestores del Ministerio de Fomento anularon arbitrariamente decisiones adoptadas en derecho por el consejo de administración de AENA en junio de 2003 para distribuir sin favoritismos el uso de la nueva terminal y su satélite", explica Álvarez-Cascos en una carta abierta remitida a Europa Press.
El ex ministro denuncia que el nuevo reparto de terminales aprobado por el actual equipo de dirección de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) sólo busca conceder "el uso exclusivo de estas costosas instalaciones a una sola compañía aérea y su alianza internacional, conculcando los derechos del resto de compañías y alianzas aéreas, condenadas a utilizar las antiguas terminales".
AENA decidió en noviembre de 2004 adjudicar la nueva terminal T4 y su satélite T4-S de Madrid-Barajas a Iberia y sus socias de la alianza aérea Oneworld y reubicar a Spanair y las compañías de Star Alliance en las antiguas terminales. AENA revocaba así los acuerdos aprobados por el anterior equipo de dirección del propio ente público, que contemplaban que el 'nuevo Barajas' estaría compartido por Iberia y Spanair, y sus respectivas alianzas aéreas.
Álvarez-Cascos califica en su misiva la revocación de estos acuerdos de "gravísima cacicada con visos de presunta prevaricación", al tiempo que subrayó que representa un "clamoroso despilfarro de fondos públicos". El ex ministro de Fomento, asimismo, considera que el nuevo reparto de Madrid-Barajas promueve una situación de "abuso de posición dominante" a favor de Iberia contraria a la legislación comunitaria en materia de competencia.
"Confío en que la Justicia repare este atropello que altera las reglas de juego del marco europeo de competencia para el transporte aéreo, beneficia a una sola empresa privada con el uso exclusivo de infraestructuras públicas que han costado al Estado más de 6.000 millones de euros, y penaliza a los viajeros, que van a soportar una situación de abuso de posición dominante de una compañía aérea, favorecida inexplicablemente por el actual equipo rector del Ministerio de Fomento de modo arbitrario", apunta Álvarez-Cascos.
La carta abierta del ex ministro llega unos días después de que el juzgado central de lo contencioso-administrativo número 7 haya desestimado el recurso de nulidad presentado por Spanair contra la resolución dictada por AENA sobre el reparto de espacios en las terminales de Barajas, al considerar que la decisión del ente público se ajusta plenamente a Derecho y que "en ningún caso" se habría producido un trato discriminatorio a favor de Iberia y en contra de la propia Spanair. La aerolínea presidida por Gonzalo Pascual ya ha confirmado su intención de recurrir esta sentencia ante la Audiencia Nacional.
CAMPAÑA CONTRA LA GESTIÓN DEL PP
Paralelamente, Álvarez-Cascos denuncia la existencia de una supuesta campaña "bien orquestada" por parte de Fomento y AENA para "censurar, suprimir y tergiversar" el papel de los Gobiernos de José María Aznar en la gestión de la ampliación del aeropuerto de Madrid-Barajas.
El ex ministro calificó de "libelo" la 'Historia de los aeropuertos de Madrid' publicada por AENA, que, a su juicio, busca de manera "fraudulenta" atribuir el impulso de los trabajos de ampliación del aeropuerto madrileño a los Gobiernos socialistas anteriores a 1996 y "ocultar la verdadera labor" realizada por los ministros de Fomento del PP --él mismo y Rafael Arias Salgado--.
"Afirmo con rotundidad que todas las obras de la ampliación del aeropuerto de Madrid-Barajas fueron realizadas en el periodo comprendido entre mayo de 1996 y abril de 2004", bajo la gestión de los Gobiernos del Partido Popular. "En consecuencia, lo que inauguró pomposamente con un año de retraso el actual presidente del Gobierno el pasado 4 de febrero (...) fueron simplemente los mostradores de facturación y de expedición de billetes de Iberia, y las tiendas comerciales de las nuevas terminales", indica el ex ministro.
"Toda la obra civil y los nuevos sistemas tecnológicos de la ampliación ya estaban a disposición de las compañías aéreas desde su inauguración por el presidente del Gobierno, José María Aznar, el 13 de febrero de 2004", sentencia Álvarez-Cascos. "Al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios", concluye.
