Zapatero dice que el papel de los Gobiernos ante estas operaciones debe ser ayudar y expresa su deseo de que "culmine bien"
MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro italiano, Romano Prodi, dijo hoy que "no hay ningún problema desde el punto de vista político" para la fusión de la concesionaria de infraestructuras Abertis con la italiana Autostrade, y que ésta es una "cuestión entre las dos empresas".
Durante la rueda de prensa que ofreció junto con el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, Prodi aseguró también que no tenía previsto reunirse en el transcurso de su visita hoy a España con el presidente de Abertis, Isidre Fainé.
No obstante, Prodi aseguró que la postura de su Gobierno ante la operación "no responde a un problema de estar cerrados a España". Citó el caso del BNL, para recordar que Italia "se abrió" y no hubo deseo, ni acciones por parte del país transalpino tendentes a evitar de que fuera a manos de un banco español.
De igual forma, indicó que las reformas que su Ejecutivo prevé introducir a la normativa sobre concesiones del país persiguen garantizar el respeto a la red de autopistas italiana, y "no tienen nada que ver con las condiciones de la fusión, que las fijan las empresas".
Prodi se refirió así a la modificación en la normativa sobre concesiones que Italia pretende introducir a través de la Ley de Presupuestos para 2007 que, entre otros aspectos, cambiaría el sistema de revisión de tarifas de las vías de pago y limitaría al 5% los derechos de voto de una constructora en el capital de la concesionaria.
Se da la circunstancia de que ACS, primer accionista de Abertis con un 24,9% del capital social será el segundo socio del grupo resultante de la integración con un 13% del capital, por detrás de una sociedad controlada por la familia Benetton, con un 24% y por delante de 'La Caixa' (11,7%). Asimismo, distintos analistas apuntan a que un cambio en el sistema de tarifas de las autopistas italianas alteraría la valoración de Autostrade y, por tanto, las condiciones de la integración.
BUENOS DESEOS DE ZAPATERO.
El jefe del Ejecutivo español, por su parte, expresó su deseo de que la fusión planteada entre las dos compañías para crear el primer grupo de infraestructuras del mundo "culmine bien", al tiempo que recordó que se trata de una cuestión que afecta fundamentalmente a dos empresas en la que el papel de los Gobiernos debe ser "facilitar, ayudar, canalizar, y respetar el proceso de las empresas".
"Evidentemente, como presidente del Gobierno de España deseo que una inversión de empresas españolas con un país como Italia culmine bien, dentro siempre de lo que es el principio de la cooperación y de hacer las cosas con el entendimiento adecuado", declaró Rodríguez Zapatero.
La visita de Romano Prodi a España se produce en vísperas de que la Comisión Europea se pronuncie a lo largo de esta semana, previsiblemente el miércoles, sobre las reticencias que Italia ha mostrado ante el proyecto de fusión.
La integración de las dos concesionarias, anunciada el pasado mes de abril, ya fue aprobada en las juntas de accionistas de las dos compañías y el pasado 22 de septiembre recibió la autorización sin condiciones de las autoridades de la competencia europeas tras constatar que la operación no tendrá un impacto negativo en la materia.
La integración supondrá la creación del primer grupo mundial de infraestructuras, con una capitalización bursátil de 25.000 millones de euros. La compañía operará en 16 países, contará con 20.000 empleados y gestionará 6.713 kilómetros de autopistas, además de una red de aeropuertos, aparcamientos y plataformas logísticas de los que prevé facturar unos 6.000 millones de euros.
