ROMA, 10 Oct. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, G. Moreno) -
El presidente de Atlantia (antigua Autostrade), Gian Maria Gross-Pietro, señaló que su compañía podría retomar las conversaciones con la española Abertis "cuando el proceso de redefinición del marco regulatorio esté completamente definido".
Gross-Pietro hizo estas declaraciones ayer por la tarde, en respuesta a los periodistas que le preguntaron sobre la posibilidad de que ambas compañías vuelvan a tratar sobre sus planes de fusión tras el reciente acuerdo alcanzado entre Atlantia y el Gobierno transalpino, en el que la concesionaria se comprometió a llevar a cabo inversiones por valor de 7.000 millones de euros.
En concreto, el presidente de la compañía italiana señaló que "estas son cosas que atañen a las dos sociedades y a sus accionistas" y que "se verán con tranquilidad" una vez completado el pacto cerrado con el Gobierno de Romano Prodi.
Gross-Pietro valoró dicho acuerdo como "muy importante" desde el punto de vista de las inversiones. No obstante, "el proceso todavía no ha terminado", por lo que "seguimos trabajando, en contacto con las instituciones y el Anas" -el organismo regulador italiano en materia de autopistas--.
Sin embargo, tras el anuncio del acuerdo verbal alcanzado con la concesionaria italiana, el ministro de Infraestructuras del país transalpino, Antonio Di Pietro, insistió en la necesidad de que haya "una autorización" en caso de que finalmente la compañía decida fusionarse con Abertis.
En diciembre del año pasado, Abertis y Autostrade se vieron obligadas a congelar sus planes de fusión a causa de las dificultades interpuestas por el Gobierno italiano, que cambió la normativa de concesiones para las autopistas justo después de que las compañías anunciaran su unión.
Los obstáculos interpuestos por el Gobierno Prodi provocaron la reacción inmediata de la Comisión Europea, que abrió dos procedimientos para analizar posibles infracciones de la normativa comunitaria por parte de Italia.
