MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -
Convergència i Unió (CiU) cree que no es conveniente tasar a la empresas de asesoramiento financiero en función de su facturación o del número de clientes con los que trabajan, dado que eso perjudicará a las compañías de menor tamaño, lo que puede acabar conduciendo a que "no presten asesoramiento a los clientes minoristas de menor patrimonio".
Así lo recoge en las cuatro enmiendas parciales que ha registrado en el Congreso al Proyecto de Ley por el que se regulan las tasas de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), cuyo plazo de presentación expiraba este martes.
En una de sus propuestas, a las que ha tenido acceso Europa Press, los nacionalistas catalanes reclaman que se elimine la nueva tasa de supervisión e inspección de las normas de conducta en la prestación de servicios de inversión, servicios auxiliares y resto de actividades del mercado de valores y se recupere el gravamen tal y como funciona hasta ahora.
HARÍAN FALTA 1.808 CLIENTES
Y es que la idea del Gobierno es que se tome como base imponible de la tasa el número de clientes minoristas y profesionales a los que la entidad preste servicios de inversión, auxiliares u otras actividades, cobrando 0,47 euros por cada uno de ellos con una cuota fija mínima de 850 euros.
Según avisa CiU, aplicar un mínimo a esta tarifa "penaliza a las empresas con un menor número de clientes", ya que al menos deberían tener 1.808 clientes para cubrir esos 850 euros mínimos en un sector cuyo número total de actores se mueve en el entorno de los 4.000, según datos de la CNMV, por lo que cada empresa tiene una treintena de clientes.
Además, la formación cree que "no es proporcional cobrar la misma tasa a todas las empresas de servicio de inversión" cuando la supervisión de las de asesoramiento financiero "requiere un menor esfuerzo y, por tanto, de un menor coste" para la CNMV dado que este tipo de compañías sólo presta un tipo de servicio, frente a los ocho que ofrecen las empresas de servicios de inversión como sociedades y agencias de valores.
Por eso, los nacionalistas catalanes quieren que se recupere el gravamen actual aplicable al volumen de ingresos brutos totales, estableciendo un mínimo "acorde y escalado con el esfuerzo requerido a las empresas con facturación inferior a los 750.000 euros anuales".
TASA POR SUPERVISIÓN DE SOLVENCIA
Con respecto a los cambios que se introducen en la tasa por supervisión e inspección de los requisitos de solvencia y actividad, que suponen la introducción de una cuota fija de 300 euros para determinadas empresas de servicios de inversión, CiU cree que se debería excluir a las empresas de asesoramiento financiero, ya que no están obligadas a remitir a la CNMV información concreta sobre su situación financiera y actividad.
También rechaza el incremento de la cuota de inscripción de sociedades de asesoramiento financiero, de un 55% aproximadamente según está redactado el proyecto de ley, al considerarlo "desproporcionado", y reclama que se recupere el modelo actualmente vigente de una cuantía fija máxima de 169,47 euros y otra mínima de 167,47 euros.
Finalmente, los nacionalistas catalanes piden que la tasa por examen de la documentación necesaria para la autorización o declaración de no oposición y de otros actos relativos a las empresas de asesoramiento financiero se desglose en tres tramos de 10.000, 5.000 y 3.000 euros en función del tipo de documento a examinar.
