Economía/Consumo.- La CE trata de evitar nuevos embargos de Rusia a la carne de más países de la UE

Actualizado: martes, 13 marzo 2007 14:21

BRUSELAS, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea tratará hoy de disuadir a Rusia de llevar a término las "amenazas" que se contienen en la carta que remitió Moscú a Bruselas recientemente en la que instaba al Ejecutivo comunitario a entregar, antes del 31 de marzo, información sobre los planes de control de residuos de medicamentos y otras sustancias en la carne de "cinco o seis" países de la UE. En caso negativo, impondría un embargo a estos productos como el que aplica actualmente contra Polonia, explicó el portavoz de Sanidad, Philip Tod.

Funcionarios comunitarios pretenden plantear esta cuestión este martes, en la segunda de las dos jornadas de su reunión en Moscú con funcionarios rusos, en la que ayer se habló del contencioso particular con Polonia.

El embargo comercial de carne que afecta a este país podría ampliarse a otros Estados miembros, entre los que el portavoz afirmó que no se encuentra España y sobre los que Rusia ha manifestado su "preocupación" a Bruselas.

Tod indicó que en la carta Moscú reclama los planes para 2007 de control de residuos de medicinas y otras sustancias que pudiera haber en los productos cárnicos de los países en cuestión y también los resultados de los controles de 2006.

El portavoz aseguró que "por supuesto que la Comisión suministrará" esta información, algo que consideró corriente puesto que Bruselas también reclama datos de este tipo a países terceros que importan productos alimentarios, incluido Rusia.

EMBARGO A POLONIA

A la espera de ver si se materializa esta advertencia, Rusia mantiene únicamente un embargo comercial desde hace más de un año contra las importaciones de carne procedentes de Polonia.

Este lunes los funcionarios europeos escucharon los primeros informes de los funcionarios rusos que visitaron recientemente Polonia para inspeccionar la situación. Concluyeron que existen "deficiencias" que explican las restricciones comerciales.

Por el contrario, Tod indicó que "la primera impresión" de los funcionarios es que "ninguna de las deficiencias justifican el embargo comercial". Añadió que las propias inspecciones comunitarias han detectado puntos débiles y que "no es que todo sea perfecto", pero insistió en que un embargo sólo puede ser "el último paso" que hay que dar "sólo cuando hay deficiencias muy muy graves".