Economía/Empresas.- La autoridad bursátil francesa acusa a la dirección de EADS de abuso de información privilegiada

Actualizado: miércoles, 3 octubre 2007 13:41

El escándalo salpica al grupo Lagardère, próximo a Sarkozy, y al Estado francés, que estaba al tanto de la situación


PARIS, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los directivos y accionistas del consorcio aeronáutico EADS, el grupo francés Lagardère y el alemán Daimler-Chrysler, vendieron las acciones de la compañía antes de hacer públicas las dificultades financieras por las que atravesaba Airbus, según publica hoy el diario conservador francés 'Le Figaro'.

El diario informa de que la Autoridad de los Mercados Financieros (AMF) considera que la dirección y los accionistas de EADS vulneraron la legislación bursátil y han podido cometer un amplio delito de abuso de información privilegiada. La AMF ha remitido el expediente al Tribunal de París y en su nota preliminar señala que el Ministerio de Finanzas, en manos de Thierry Breton cuando se produjeron los hechos, conocía las dificultades que se avecinaban y dio luz verde a la venta de las acciones de Lagardère.

La AMF ha enviado a los tribunales una nota preliminar en la que se habla de un delito cometido entre noviembre de 2005 y marzo de 2006 antes de que las dificultades de Airbus se hicieran públicas y que la cotización de las acciones de EADS se hundiera en Bolsa.

En un principio, la autoridad bursátil francesa sacó a la luz casi unos 1.200 implicados que habían vendido mas de 10 millones de títulos EADS entre mayo de 2005 y junio de 2006 y que se habían embolsado casi 90 millones de euros de plusvalías. Pero para actuar con celeridad, decidió concentrarse en los altos directivos de EADS y Airbus y en los accionistas del consorcio, formado por un grupo de 20 personas.

Según 'Le Figaro', la autoridad bursátil subraya en su nota "el carácter simultáneo y masivo" de las ventas realizadas por los directivos, que se materializaron en dos periodos autorizados por el reglamento interno de EADS: entre el 9 y el 29 de noviembre de 2005 y entre el 8 y el 24 de marzo de 2006, es decir, antes de la cesión del 15% de EADS que poseían DaimlerChrysler y el Grupo Lagardère y de que sonaran las alarmas sobre los resultados del consorcio aeronáutico.

La AMF sostiene que las ventas no se habrían producido si las noticias sobre la salud financiera de EADS hubieran sido buenas. Además, 14 de los 21 miembros del Comité Ejecutivo de EADS y de Airbus no habían vendido nunca acciones antes de noviembre de 2005.

Además, los dos presuntos culpables, DaimlerChrysler y Lagardère , que vendieron cada uno el 7,5% del capital de EADS el 4 de abril de 2006, lo hicieron de una manera "extraña", según la autoridad bursátil. Ambos optaron por una venta a término, es decir realizada en 2007 para beneficiarse de las nuevas medidas fiscales, más favorables, pero sobre la base de la cotización de 2006. El hecho de no esperar a 2007 para vender demuestra, según la nota remitida al Tribunal de París por la AMF, "una previsión por parte de los dos accionistas de EADS de que las acciones bajarían en el futuro".

Las dificultades de Airbus en la fabricación de sus nuevos modelos de larga distancia, el A-380 y el A-350, comenzaron a ponerse de manifiesto en el mes de junio de 2005, durante un consejo de administración de EADS.

Las proyecciones de los resultados a medio y a largo plazo para 2006-2007 llevan entonces al grupo a lanzar un plan de reducción de costes y el director financiero de EADS, Hans Peter Ring, señala durante la reunión del consejo que sólo el aumento de los gastos de investigación y desarrollo provocaría unas pérdidas entre 4 y 5 euros por título si se hiciera público.

Pero el 10 de octubre de 2005, los directivos de Airbus constatan delante de los de EADS que su previsión de resultados son muy inferiores a los que espera el mercado y para evitar una eventual catástrofe en Bolsa, EADS pide a su filial repartir los costes en tres ejercicios.

Con este cambio del método contable se logra adelantar a 2005 y 2006 una parte de los sobrecostes de producción del A-380 y al mismo tiempo añadir al balance financiero de estos dos años 100 y 200 millones de euros respectivamente, aumentando por tanto el resultado de 2007.

EL GOBIERNO CONOCÍA LA SITUACIÓN

La lista de sospechosos elaborada por la autoridad bursátil francesa afecta a todas las personas que conocían los planes empresariales para el periodo 2006-2008 de Airbus y EADS. Además de los grupos Lagardère y Daimler-Chrysler, representados por sus directores, Arnaud Lagardère y Manfred Bischoff, respectivamente las personas acusadas en la nota remitida a los tribunales son los principales directivos del constructor aeronáutico.

El Estado francés, según el rotativo galo, también estaba al corriente de la situación y tras una reunión celebrada en diciembre entre los directivos de EADS y la Agencia de participación del Estado, el ministro de Finanzas en ese momento, Thierry Breton, recibe una nota en la que se le indica que EADS iba a atravesar una "zona de turbulencias" y por tanto que sería bueno para el Estado aprovechar el valor de los títulos y proponer una cesión parcial de su participación en el consorcio.