Según algunos analistas, la huelga podría costar hasta 22 millones de euros diarios a la aerolínea
LONDRES, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
British Airways y el sindicato de transportes T&G continúan hoy con reuniones de última hora con el objetivo de frenar la huelga de los tripulantes de cabina prevista para mañana y el miércoles, que ha obligado a la aerolínea a cancelar ya 1.300 vuelos, 60 de ellos en España. La compañía se mostró confiada en que el pasado sábado pudiera ofrecer alguna conclusión de sus reuniones.
La decisión de la compañía de cancelar los vuelos antes de que se produzca la huelga reside en dar la oportunidad a sus clientes de buscar con suficiente antelación medidas alternativas para poder realizar su viaje. Las negociaciones por lo tanto se alargan hasta hoy después de que en sendos encuentros durante el fin de semana no lograran alcanzar ningún acuerdo al respecto. El sindicato ha propuesto nuevos paros para los días 5 y 7 de febrero y para los días 12 y 14 de ese mismo mes si no llegan a un acuerdo.
Según algunos analistas, la huelga costará a la compañía aérea entre diez y 15 millones de libras cada día (entre 15 y 22 millones de euros diarios). La aerolínea canceló un total de 1.300 vuelos (650 salidas con sus vueltas respectivas) por los dos días de huelga de los tripulantes de cabina, que dejarán sin actividad los días 30 y 31 de enero los aeropuertos londinenses de Heathrow y Gatwick. Del total, 950 vuelos tenían como origen o destino Heathrow y 350, Gatwick.
En España, la huelga afectará a un total de 60 vuelos en los dos días --30 salidas y las respectivas llegadas--. Así, quedan cancelados cada día 16 vuelos entre Madrid y Londres y un total de 14 entre Barcelona y la capital británica, informaron a Europa Press fuentes de la aerolínea.
El paro no afectará a ninguna de sus compañías filiales como es el caso de GB Airways, que opera vuelos entre el resto de ciudades españolas y Londres. Asimismo, según las fuentes consultadas, el martes aterrizarán en el aeropuerto de Gatwick por la noche procedentes de la costa este de Estados Unidos.
La aerolínea confirmó que se habían roto las negociaciones con el sindicato de transportes británico y dijo "sentir profundamente" que miles de personas resulten afectadas por el paro, convocado en protesta por los días que los empleados pueden tomar libres por enfermedad y por la política salarial de la empresa. Del total de 14.000 empleados de British Airways, 11.000 son miembros del sindicato de transportes y el 96% de ellos han votado a favor de la huelga.
