BRUSELAS, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea decidió hoy expedientar a Polonia por obstaculizar indebidamente la compra del banco alemán HVB por parte del italiano Unicredito. El Ejecutivo comunitario considera que Varsovia ha usurpado su competencia exclusiva sobre las fusiones de dimensión comunitaria al exigir a Unicredito que venda su participación en la entidad polaca BPH, pese a que Bruselas había autorizado esta adquisición.
Las autoridades polacas tienen 15 días laborales para responder a las preocupaciones de la Comisión, que, si no queda satisfecha, intervendrá para impedir que Varsovia bloquee la fusión entre HVB y Unicredito. La comisaria de Competencia, Neelie Kroes, destacó que es necesario garantizar que los Estados miembros no se opongan a concentraciones que son competencia de la Comisión, ya que de lo contrario "el mercado único de la UE podría hundirse en el caos".
En junio de 2005, Unicredito decidió adquirir el banco alemán HVB, que controla indirectamente la entidad polaca BPH. El 18 de octubre, la operación fue autorizada por la Comisión, que evaluó su impacto sobre Polonia y sobre el resto de mercados afectados, y concluyó que no planteaba problemas serios en materia de competencia.
No obstante, el 20 de diciembre del año pasado, las autoridades polacas exigieron a Unicredito la venta de sus participaciones en BPH, alegando que cuando el banco italiano adquirió la entidad polaca Pekao en 1999 tras su privatización, una de las condiciones le impedía, durante un periodo de 10 años, abrir filiales o sucursales en Polonia, comprar bancos activos en este país o realizar inversiones sobre empresas que operen en el sector bancario.
De acuerdo con Varsovia, esta cláusula se incluyó en el acuerdo de privatización de Pekao para asegurar la protección de la competencia. El 1 de febrero de 2006, las autoridades polacas enviaron una carta a Unicredito en la que le dan tres meses para desprenderse de BPH, y, si no lo hace, anularán completamente el acuerdo de privatización de Pekao.
La Comisión considera que esta amenaza de Polonia de anular la privatización de Pekao constituye una medida que puede impedir u obstaculizar la fusión de Unicredito y HVB, y que su objetivo es impedir la competencia efectiva. Asimismo, señala que esta cláusula del acuerdo de privatización es incompatible con el derecho comunitario y con las reglas del tratado sobre el derecho de establecimiento y la libre circulación de capitales, y por ello no puede invocarse para bloquear la operación.
El Gobierno polaco dispone de 15 días laborables para expresar su punto de vista sobre las conclusiones preliminares del Ejecutivo comunitario. Si su punto de vista se confirma, Bruselas podría exigir que Varsovia se abstenga de hacer valer el acuerdo de privatización de Pekao para impedir la fusión de Unicredito y HVB. Esta decisión sería directamente aplicable y podría ser invocada ante los tribunales nacionales o cualquier otra autoridad pública polaca.
