LISBOA, 16 Mar. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -
La Autoridad de la Competencia (AdC) portuguesa no se opone a la concentración del Banco Comercial Portugués y el Banco Portugués de Inversión, en caso de que la Oferta Pública de Adquisición (OPA) lanzada por el primero triunfe, aunque impone condiciones y obligaciones, además de un conjunto de mecanismos de fiscalización para monitorizar y verificar la efectiva aplicación de las mismas, anunció hoy el organismo.
En comunicado la AdC indica que una vez asumidos los compromisos por parte del BCP la concentración de los dos bancos no supone "la creación o el refuerzo de una posición dominante".
Entre los compromisos asumidos por el BCP están la alienación de las participaciones del BCP y del BPI en la Unicre, el desarrollo de una operación de "acquiring", la venta de 60 sucursales del BPI a una entidad exterior al BCP, la venta de una cartera de clientes empresariales por valor de 450 millones de euros y medidas relativas a la movilidad de los Clientes Empresa, en particular no cobrar comisiones por la rescisión unilateral de cuentas y abastecimiento del histórico de la relación bancaria de la empresa.
La AdC considera que si estos compromisos se cumplen, si la operación de concreta finalmente "se eliminaran de forma eficaz y eficiente los impactos competitivos negativos en esos mercados". Además el organismo recuerda que su decisión incluye un conjunto de mecanismo de fiscalización del cumplimiento de las obligaciones y condiciones asumidas por el BCP, que permiten monitorizar y verificar su efectiva aplicación.
