MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
La eléctrica estadounidense Energy East, recientemente adquirida por Iberdrola, ha zanjado los litigios con los accionistas contrarios a la operación y ha convocado para el próximo 20 de noviembre la junta de accionistas en la que acordará su venta.
Junto a esto, la compañía mantiene la intención de cerrar la operación de venta a Iberdrola en el primer semestre de 2008, y de no volver a cotizar ni en Nueva York ni en ningún otro parqué tras el cambio de propiedad.
En un informe remitido al regulador estadounidense (SEC, Securities and Exchange Commission), Energy East explica que el pasado 26 de septiembre sus directivos alcanzaron un acuerdo con los demandantes, que consideraban inadecuada la ecuación de cambio de la transacción.
Como resultado del acuerdo, que está pendiente de la aprobación del tribunal correspondiente, los demandantes acuerdan no seguir adelante con el procedimiento, al tiempo que la eléctrica se compromete a correr con las minutas de los abogados y los gastos del proceso.
El pasado 6 de julio fue presentada una demanda colectiva en el Tribunal Supremo del Estado de Nueva York en la que se consideraban los términos de la operación "injustos e inadecuados" porque no procuraban a los accionistas una prima adecuada.
Energy East, que dijo que respondería a esta demanda "vigorosamente", sigue negando el contenido de las acusaciones. Este tipo de demanda es habitual en Estados Unidos, donde Repsol YPF acordó recientemente con un grupo de accionistas el pago de 5,8 millones de euros en concepto de indemnización por el efecto sobre la cotización del recorte de reservas anunciado a comienzos de 2006.
Por otro lado, la junta de accionistas de Energy East se celebrará en Nueva York y tendrá como cometido el sometimiento a votación del acuerdo de fusión del pasado 25 de junio con Iberdrola.
Como ya hizo anteriormente, el grupo norteamericano reitera que su consejo de administración recomienda de forma "unánime" la operación, en la que Iberdrola se comprometió a desembolsar 3.400 millones de euros en efectivo, además de asumir su deuda, que asciende a 3.000 millones.
La empresa norteamericana opera en los negocios de distribución, generación y comercialización en cinco estados de Norteamérica, que son los de Nueva York, Maine, Massachusetts, New Hampshire y Connecticut.
