Facturaron un 5,4% más en 2006, hasta 40.724 millones de euros, e invirtieron 2.176 millones, un 4,4% más
MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asociación de Grandes Empresas de Distribución (Anged), Juan Manuel de Mingo, denunció hoy que el intervencionismo de las administraciones públicas es un "grave obstáculo" para el desarrollo del comercio porque desalienta las inversiones y consagra posiciones de dominio, proceso que calificó de "contra natura".
"El problema de la intervención administrativa empieza a ser un grave obstáculo para cualquier empresa con vocación de trabajar en todo el territorio español", afirmó hoy en la asamblea anual el presidente de la patronal de las grandes superficies, quien estuvo acompañado del presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán.
De Mingo denunció que la legislación actual en materia comercial penaliza a las empresas más eficientes, al tiempo que las normativas autonómicas fragmentan el mercado haciendo que el tejido empresarial pierda fuerza y asfixiando sus objetivos de alcanzar mayores niveles de eficiencia.
"El comercio es el único sector productivo en el que se ha configurado un entramado normativo concebido especialmente para penalizar la eficiencia de las empresas más competitivas y limitar su capacidad de dar servicio a los consumidores", aseveró De Mingo, partidario de una rápida implementación en España de la Directiva europea de servicios.
El presidente de las grandes superficies alegó que el intervencionismo "disfrazado de planificación" sólo es válido para regular sistemas menos complejos que el comercio y lamentó que en España haya multitud de órganos que intervienen en la economía. "El poder no puede sustituir nunca la libertad de elegir del ciudadano y la capacidad de riesgo del empresario", aseveró.
De Mingo reclamó a los poderes públicos "que no interfieran en la espontaneidad del mercado con disculpas que encubran clientelismos o proteccionismos", ya que las administraciones han invadido las competencias empresariales y la libertad del consumidor "de forma desproporcionada y sin justificación".
En la misma linea, el presidente de la CEOE dijo compartir la visión de De Mingo de que en España es necesario "un mercado más libre, menos intervencionismo y más desregulación", y de que los formatos comerciales no se catalogan en grandes, medianos y pequeños, sino en "eficientes y no eficientes".
"Se trata de creer más en el mercado y más en la sociedad civil", alegó Díaz Ferrán, a favor de "convencer" al Gobierno de que hay que consensuar más la regulación entre las autonomías para facilitar la actividad empresarial, y de ahondar en el "buen camino" emprendido por la directiva europea de liberalización de servicios.
7.300 NUEVOS EMPLEOS.
Las grandes empresas de distribución integradas en Anged facturaron 40.724 millones de euros en el ejercicio 2006, lo que significa un aumento del 5,4% en relación a las ventas del año anterior, y crearon 7.349 empleos, hasta alcanzar un total de 234.836 puestos de trabajo.
El volumen global de inversiones alcanzó 2.176 millones de euros, un 4,4% más. "Estos datos confirman que las compañías mantienen el pulso inversor pese a las trabas impuestas en determinadas comunidades que impiden desarrollar todo el potencial de crecimiento de las empresas de distribución", según Anged, que defiende los intereses de El Corte Inglés, Alcampo, Carrefour, Ikea y Eroski, entre otras.
