MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
Iberia no asumirá la gestión de la nueva aerolínea con que se dispone a incorporarse en el segmento del bajo coste, en la que pretende jugar un papel de socio financiero, según confirmó hoy el presidente del grupo aéreo, Fernando Conte, quien admitió que la compañía aún sigue estudiando "seriamente" las diferentes alternativas para participar en una 'low cost' de nueva creación.
"Iberia no va a intervenir en la gestión de la futura aerolínea. Es un error típico del sector aéreo que Iberia no cometerá", explicó Conte en la rueda de prensa de presentación de los resultados financieros del ejercicio 2005. "Nosotros lo que sabemos es gestionar una compañía aérea de red", sentenció.
Los planes de Iberia pasan por mantener una participación accionarial minoritaria, de en torno al 20%, en el capital de la futura nueva 'low cost'. "Iberia está estudiando seriamente varias iniciativas que existen en el mercado. Estamos negociando con diferentes posibles socios", apuntó Conte. Las compañías aéreas Air Nostrum e Iberworld (grupo Iberostar) y Caixa Catalunya ya han reconocido expresamente encontrarse entre los partícipes en estas conversaciones.
Conte quiso destacar que en ningún caso la eventual participación de la compañía en uno de estos proyectos significará el salto de Iberia al negocio del bajo coste. "Iberia no va a entrar en el bajo coste. La compañía está estudiando sólo invertir entre diferentes alternativas interesantes que creen valor para el grupo. En ningún caso vamos a mezclar el proyecto de aerolínea de red de Iberia con el de la futura compañía de bajo coste", indicó.
Iberia admite que resulta imposible embarcarse de manera inmediata en el eventual lanzamiento de una nueva aerolínea de bajo coste y, de hecho, no se plantea que la compañía de nueva creación inicie sus operaciones hasta "finales de 2006 o principios de 2007", según reconoció recientemente el consejero delegado de la compañía, Ángel Mullor. Previsiblemente, la nueva compañía aérea tendrá su principal base de operaciones en el aeropuerto de Barcelona-El Prat, aunque también tendrá presencia en un Madrid-Barajas ampliado.
