BILBAO, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
El grupo Orbea, dedicado a la producción y desarrollo de bicicletas, ha apostado por China para implantarse en el mercado asiático, donde contará con una planta productiva (Orbea Kunshan), que inicia este mes su actividad, y en la que ha invertido aproximadamente 2,66 millones de euros. La producción inicial prevista será de 60.000 unidades.
En la actualidad, Orbea está presente en un total de 50 países, con una apuesta "decidida" por convertirse en una marca europea de referencia. El grupo, cuya sede central se encuentra en Mallabia (Vizcaya), dispone de cuatro empresas filiales en EEUU, Portugal, Australia y Francia, de las que Orbea USA y Lusorbea disponen de actividad productiva mientras que las otras dos son empresas de distribución comercial.
Dentro su estrategia de expansión, Orbea apuesta por China, mercado en el que hasta ahora no estaba implantada la compañía, según información facilitada a Europa Press por el director gerente del grupo, Miguel Ocaña.
Orbea se ha integrado en el parque empresarial que Mondragón Corporación Cooperativa (MCC) desarrolla en Kunshan, y en el que también se ubicarán, inicialmente, otras cooperativas del grupo como Orkli, Dikar-Wingroup y Oiarso.
En una primera fase de la planta de Orbea, se han construido un total de 5.000 metros cuadrados, si bien la compañía prevé duplicar esta superficie en los próximos años, a medida que se desarrollen los mercados atendidos desde esta planta.
El inicio de la actividad está previsto para este mes y, en la actualidad, el grupo se encuentra en la fase de contratación y formación del personal. Su responsable destacó que, cuando se complete la implantación, la inversión alcanzará aproximadamente los 2,66 millones de euros.
La producción inicial se situará en torno a las 60.000 unidades y se irá incrementando con el tiempo. En principio, se orientará la producción a los mercados no europeos, como asiáticos, americano y australiano.
EJERCICIOS 2006-2007
Orbea, que no prevé nuevas implantaciones productivas en un futuro inmediato, cerró el pasado ejercicio con una facturación de 56 millones de euros con un resultado neto de un 9%. Tanto en cifra de ventas como en beneficio el crecimiento registrado fue de aproximadamente el 10% respecto a 2006.
La previsión para 2007 es alcanzar una cifra de negocio de 60 millones, de los que un 70% corresponderán a ventas internacionales. El principal mercado de Orbea sigue siendo el español, con un porcentaje de las ventas del 30%, y le sigue el norteamericano, con un 25%. Además, Francia es para la empresa su principal mercado europeo de exportación. En la actualidad, la producción de la compañía se sitúa entre las 180.000 y las 200.000 unidades
I+D
El grupo destinó el pasado año a I+D un 2,5% sobre las ventas, alrededor de 1,5 millones de euros, una cifra "proporcionalmente creciente" en los últimos años. La compañía está inmersa, desde hace muchos años, en una estrategia de desarrollo de producto y su apuesta "decidida" por la innovación se está evidenciando "claramente" en sus resultados empresariales.
En concreto, aproximadamente un tercio de las ventas del grupo corresponden a producto desarrollado en los tres últimos años, lo que, según destacó Ocaña, "da una idea de la trascendencia" que, para el desarrollo de la marca, está teniendo la inversión en I+D realizada en los últimos años.
Ocaña subrayó que uno de los elementos con los que se puede constatar el grado de compromiso con la innovación es el número de patentes de invención y, en este sentido, destacó que, en los últimos tres años, han registrado hasta una decena de patentes de producto. "Estos datos, para un sector tecnológicamente maduro, como es el de la bicicleta, representa un indicador del nivel de aportación de que es capaz la marca", añadió.
El responsable de Orbea destacó que este esfuerzo se traduce en una gama de productos de "alto contenido tecnológico", que, en su gran mayoría, están relacionados con la aplicación de nuevos materiales en la fabricación de cuadros de bicicleta y, especialmente, de los composites de fibra de carbono.
"El conocimiento en diseño y aplicación de estos nuevos materiales ha permitido a Orbea dominar con seguridad la tecnología de la fibra de carbono y alcanzar prestaciones superiores a las de los materiales tradicionales", explicó Ocaña.
El responsable de Orbea afirmó que estos resultados se aprecian en la nuevo 'Oiz', una bicicleta de suspensión total dedicada al cross country, con un diseño basado en la utilización de una pieza flexible de carbono a modo de articulación, que permite alcanzar, además de unas prestaciones máximas de confort y rigidez, una ligereza solo posible con la eliminación de piezas mecánicas tradicionales.
Esa apuesta por el I+D se evidencia también en un dominio del cálculo estructural de estos nuevos productos, que permite diseñar cuadros con pesos inferiores al kilo, como es el caso de los cuadros de carbono de carretera 'Orca' y 'Opal' o al cuadro de aluminio ultraligero 'Arin'.
"Hoy en día, no es posible engañar al cliente y 'vender humo'. Este es el razonamiento que empuja a Orbea a plantearse seriamente el I+D como una estrategia de desarrollo sostenido en el tiempo, buscando un posicionamiento de la marca entre las consideradas mundialmente como innovadoras tecnológicamente", concluyó.