Clos cifra en 1.500 millones la previsión de déficit de tarifa para 2007
MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Industria está negociando con el comisario de Energía de la Unión Europea, Andris Piebalgs, una solución para las tarifas eléctricas a los grandes consumidores industriales españoles, a la vista de que en julio de 2008 está prevista la desaparición del actual sistema y el Gobierno quiere dar una respuesta adecuada a los clientes "muy dependientes de la energía en costes finales", aseguró hoy el ministro de Industria, Juan Clos, en una comparecencia en el Senado.
Durante su intervención en la Cámara Alta, el ministro cifró en 1.500 millones de euros la previsión de déficit de tarifa generado en 2007. Este desajuste procede de la diferencia entre el coste reconocido de la energía y los ingresos de las compañías eléctricas.
Clos explicó que la transición hacia el final de la tarifa regulada se realiza a "un ritmo adecuado" y que, como está previsto, a mediados del año que viene desaparecerán las tarifas de alta tensión. "En estos momentos las tarifas ya son aditivas y ya recogen el precio real de la generación de energía", sometido a la evolución de los mercados mundiales, aseguró el ministro.
"Queda una sola tarifa, la G-4 de los grandes consumidores, que estamos peleando en la UE para ver cómo gestionarla", continuó antes de adelantar que el Gobierno intentará buscar una fórmula de acuerdo en Bruselas en la que se eviten "engaños" y "'dumping' interno" entre los países socios. "Estamos trabajando con el comisario Piebalgs para conseguir una solución final y adecuarla al modelo general del mercado energético", añadió.
A partir del año próximo desaparecerá el actual régimen regulado, pero se mantendrá la tarifa de último recurso para un grupo aún sin determinar de consumidores domésticos. "Hemos tenido un comportamiento leal con la UE", pese a "algunas crisis y discusiones en algunos apartados", señaló Clos para describir el proceso de adecuación del modelo español al entorno europeo.
Sobre las tarifas domésticas, aseguró que la introducción de hábitos de consumo permitirán reducir el coste de la factura final, y destacó el proceso de introducción de los nuevos contadores, el plan 'renove' de electrodomésticos y las políticas de aislamiento térmico como algunas de las medidas para la mejora del autocontrol de la demanda.
El resultado será que "el recibo mensual final del cliente no se incremente, a pesar del incremento" asociado a los esfuerzos de los tres últimos años por transitar hacia el nuevo modelo, afirmó.
