MADRID 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Banco Popular, Angel Ron, aseguró hoy que el proyecto de código de buen gobierno de empresas cotizadas pone en "desventaja" a las empresas españolas frente a las empresas europeas e internacionales, a la vez que lanza un mensaje de "desconfianza" en los gestores de las empresas.
En rueda de prensa para presentar los resultados del Banco Popular en 2005, Ron calificó el proyecto de "excesivamente reglamentista" y consideró que "en ocasiones pretende sustituir la voluntad del consejo de administración".
En su opinión, este proyecto "envía un mensaje de desconfianza en los administradores de las empresas que no es positivo", por lo que consideró conveniente introducir cambios.
"Creo que este código requiere de algunas alteraciones porque pone en desventaja a las empresas españolas respecto a las empresas europeas e internacionales", subrayó Ron.
En este sentido, dijo que "afortunadamente" se había modificado la pretensión inicial de impedir la cotización de las filiales de una empresa con presencia en bolsa, algo que, en su opinión, no tiene sentido, ya que, según puso de ejemplo, "las filiales del Popular cotizan en bolsa desde hace mucho tiempo sin conflicto de intereses".
Preguntado por la escasa presencia de mujeres en los órganos de dirección del Banco Popular, Ron consideró que la presencia de mujeres en la alta dirección de las empresas es "cuestión de tiempo".
En este sentido, indicó que en la actualidad las mujeres suponen el 25% de la plantilla del Banco Popular, con un aumento del 12 ó 13 puntos de crecimiento en los últimos años. "Es esperable que vayan accediendo a puestos de responsabilidad más por una cuestión de preparación que de imposición", concluyó.