Economía/Finanzas.- Visa superó en 2005 la barrera de 40 millones de tarjetas en circulación en España

Actualizado: martes, 7 marzo 2006 14:56


MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -

El director general de Visa Europe en España, Luis García Cristóbal, indicó hoy que la compañía superó en diciembre de 2005 la barrera de los 40 millones de tarjetas en circulación en España, en el marco del IX Congreso Internacional de Tarjetas y Medios de Pago 'CIT 2006'.

Según datos oficiales del Banco de España, en el tercer trimestre de 2005 el número total de tarjetas en circulación en el país de los distintos medios de pago era de 63,87 millones.

García Cristóbal indicó que la industria está "en un punto de inflexión en medios de pago, donde los volúmenes van a seguir creciendo", e indicó que las entidades invierten cada vez más para posicionar las tarjetas.

El director general de la compañía en España señaló que el 50% del volumen de intercambios con tarjetas Visa ya tiene lugar en comercios, pero apostó por intentar potenciarlo. Para ello, señaló que una de las claves es la educación de los consumidores, "que no valoran los servicios añadidos que hay detrás de una tarjeta". En este sentido, el objetivo de Visa Europa es "reemplazar el dinero en efectivo y los cheques por el uso de la tarjeta", señaló.

García Cristóbal afirmó que "existe un nuevo escenario", y apostó por analizar el negocio que se ha desarrollado hasta ahora y "mantener la rentabilidad mediante la aplicación de determinadas estrategias comerciales". En este sentido, señaló que la diferenciación es importante en un contexto en el que hay una "competencia feroz".

El directivo indicó que en España "todavía hay margen para seguir creciendo", y abogó por trabajar en nuevos productos, entrar en el 'revolving' (pago aplazado), y apostar por la tecnología.

Por otro lado, el director de Visa Europe en España señaló que la compañía cree en el área única europea de medios de pago (SEPA), y que hará "lo posible" por adaptarse y que sea una realidad. Sin embargo hizo un llamamiento a escuchar a las entidades financieras y "no generalizar" en el negocio, apostando por flexibilizar las normas para que nuevos productos entren en el mercado".

Para García Cristóbal, el mejor enfoque es "una regulación de mínimos", y para conseguirlo es necesario que haya rentabilidad, libertad de elección, transmisión de seguridad y confianza, lucha contra el fraude y "una base regulatoria consistente".