SANTANDER, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los responsables de la Federación Española de Empresarios Productores de Leche (Prolec) consideran que "no existen razones objetivas que justifiquen un próximo descenso de los precios al productor", según han anunciado algunas organizaciones agrarias en los últimos días.
La federación señala en un comunicado que pese a que las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) que los ganaderos empezaron a recibir en 2005, deberían servir para paliar bajadas de los precios en origen, "si España ajustara su producción a la cuota láctea (6 millones de toneladas), el precio de la leche debería incrementarse".
Dichas ayudas "fueron insuficientes para paliar la situación de crisis" que afecta al sector productor de leche", según el director general de Prolec, Carlos Gil, para quien "algunas acciones promovidas por la Federación han contribuido al descenso de la oferta de leche en España y, por tanto, a cierta estabilidad de los precios pagados al productor".
Entre estas acciones destaca la denuncia que la Federación interpuso, ante la Oficina Europea de Lucha Contra el Fraude (OLAF), por dejación de funciones de las Administraciones Públicas españolas en el control de la "sobreproducción" o "leche negra".
Asimismo, Prolec también está personada en la Audiencia Nacional, como acción popular, por el caso de 'El Churtal', en el que actualmente se estudian los presuntos implicados en circuitos sospechosos de fraude, por la compra-venta de "leche negra" en España.
PRECIOS AL LIMITE.
Según Prolec, actualmente, los productores de leche españoles cobran alrededor de 0,312 euros por litro de media, precio base al que hay que restarle las penalizaciones por exceso de células somáticas u otras alteraciones de la leche que entra en las centrales.
Con estos precios, Prolec denuncia que los ganaderos se encuentran "al límite" de los costes de producción, que la Federación tiene calculados en 0,321 euros por litro. Para el director general de Prolec, "la leche española tiene un precio que debería ser, como mínimo, el precio francés o portugués más el coste del transporte a España".
Por ello, Gil anima a las industrias a incentivar a los productores de leche españoles con unos precios dignos por su producción, "sin amenazas, ya que las centrales lecheras necesitan de la producción autóctona para no tener que soportar de forma indefinida los elevados costes que supone el transporte de leche desde cualquier país vecino y las fluctuaciones de producción de dichos países".