Propollo afirma que, de producirse un brote, se vacunarán los animales o se sacrificarán si se considera necesario
VALENCIA, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asociacion de Productores de Pollo de España (Propollo), Federico Félix, lanzó hoy un mensaje de tranquilidad ante los últimos casos de gripe aviar conocidos en algunos países europeos y aseguró que, de llegar la enfermedad a España, "no pasará nada", ya que el sector está preparado y dispuesto incluso, si es necesario, a acometer el sacrificio de los animales.
En este sentido, explicó que se controlará a los animales, se les dará "lo que se les tiene que dar y si se tienen que sacrificar, se sacrificarán". Así, indicó que los pollos se vacunarán en caso de que la gripe llegue a España y no antes, porque sería, a su juicio, "una tontería" que no beneficiaría a los animales si finalmente no se produjera ningún brote. "Hay que esperar el acontecimiento", comentó.
Félix resaltó que "si un día llega la enfermedad a casa, no pasará nada que no haya ocurrido en países como Francia, Italia o Alemania" y explicó que el problema se produce cuando estos brotes aparecen en países asiáticos o africanos, donde las costumbres "son muy diferentes" y la gente convive con los animales "y se puede contagiar".
"CONTROL ABSOLUTO" EN ESPAÑA SOBRE LAS AVES.
Asimismo, Félix resaltó el "control absoluto sobre todas las aves" y comentó que la "única" medida excepcional que se ha tomado es, como precaución, encerrar algunos animales silvestres o que estaban en caseríos o casas rurales, "por si hubiera algún ave contaminada, que no lo transmita a otras". El resto, añadió, es continuar con las normas "muy exigentes" que ya sigue el sector.
En este sentido, tranquilizó a los consumidores e indicó que las aves españolas están "perfectamente controladas" y cumplen con la normativa europea. A su vez, subrayó que los pollos, por sí mismos, no padecen la gripe, sino que pueden ser contagiados por aves silvestres y que, en cualquier caso, la transmisión a humanos no se produce por el consumo de esta carne, sino por el contacto con animales enfermos.
Félix insistió en los pollos tienen más controles que otros animales, siguen todas las normas exigidas por la UE y se sabe "quienes son sus padres, sus abuelos, dónde han nacido, criado, sacrificado y vendido". A su juicio, esto supone "una absoluta garantía", por lo que el consumidor tiene que saber que el producto "está totalmente controlado".
NO BAJAN LAS VENTAS.
Félix señaló que no se ha constatado en España un descenso en las ventas de pollo y que la situación es de "absoluta normalidad" y dijo que en febrero "las ventas nunca son alegres, pero la situación es de normalidad". En Francia o Italia, según le han comentado sus homólogos de estos países, se notó "un poco de descenso las primeras semanas", pero ahora se ha vuelto a la normalidad.
Explicó que en España se consumen 22 millones de kilos de pollo a la semana y que nuestro país es autosuficiente y no importa, salvo "puntualmente" en verano, y que ésta siempre que procede de otros países europeos como Francia e Italia.
En relación a la partida de pollo y otros productos chinos incautados hace unos días en Benidorm, señaló que fue un hecho aislado y que fue directamente a los restaurantes, donde al cocerla "desaparecen" los problemas.
Félix señaló que, más que un mensaje de tranquilidad, hay que lanzar un mensaje de "racionalidad", porque los españoles "no tienen que cambiar ningún hábito alimenticio", deben comprar "en sus establecimientos de toda la vida, saber que el producto es perfectamente válido, y que tienen que cocinarlo y no comerlo crudo, como nunca se ha hecho".
Por último, explicó que el sector del pollo es uno de los más grandes de España, del que viven 120.000 familias y que cada semana se producen 22 millones de kilos de carne, del que se exporta un 1%.
