MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
El ejercicio 2006 ha supuesto resultados récord para el sector siderúrgico tanto en los datos de producción, con una cifra final de 18,4 millones de toneladas, como en las entregas de las fábricas españolas a los mercados, que superaron los 19 millones de toneladas, y en el consumo aparente de productos siderúrgicos, que aumentó un 12,8%, hasta alcanzar los 23,6 millones de toneladas, según el avance de los datos de cierre del ejercicio facilitado por Unesid.
La facturación del sector alcanzó los 13.000 millones de euros, por el efecto combinado del aumento del volumen y de la recuperación de los precios en todos los mercados.
La producción total de acero bruto superó en 2006 la barrera de los 18 millones de toneladas, alcanzando una cifra final de 18,4 millones de toneladas, lo que supone un aumento del 2,7% respecto de la producción del año 2005.
La evolución de la producción por tipos de acero ha sido dispar. Así, mientras que la producción de aceros inoxidables aumentó el 11,5%, la de otros aceros aleados disminuyó casi el 5%. La producción de aceros no aleados, a pesar de una disminución significativa en la producción de origen integral, aumentó el 2,5% respecto al año anterior, como consecuencia del buen comportamiento de las acerías de horno eléctrico.
La producción de laminados en caliente fue el producto que mejor comportamiento registró, al alcanzar la cifra de 18,3 millones de toneladas, lo que representa un incremento del 7,1% respecto a 2005.
Por su parte, el consumo aparente de productos siderúrgicos (excluidos los productos transformados) recuperó lo perdido en el año 2005 y aumentó el 12,8%, hasta alcanzar 23,6 millones de toneladas, lo que representa un consumo per cápita de 527 kilogramos, cifra que Unesid considera especialmente significativa si se tiene en cuenta el aumento de la población española en los últimos años (44,7 millones de habitantes en 2006).
El mayor aumento en el consumo aparente se experimentó en los productos planos, como consecuencia de la recuperación de esta familia de productos respecto del año 2005.
En cuanto al comercio exterior, las importaciones totales de productos siderúrgicos y de primera transformación alcanzaron los 14,2 millones de toneladas en el año 2006, lo que supone un récord absoluto, que sólo la solidez del mercado ha podido absorber sin consecuencias desastrosas. El crecimiento sobre el año anterior ha sido del 26%. En valor, las importaciones ascendieron a un total de 8.291 millones de euros, con una subida del 25% respecto del año anterior.
El aumento de las importaciones se concentró sobre todo en las procedentes de países terceros y, muy en particular, en las de China, que ha pasado en un par de años de ser una oportunidad como destino a constituirse en el quinto suministrador absoluto del mercado español, desbancando a otros suministradores tradicionales como el Reino Unido o Turquía.
Los tres países suministradores más importantes (Francia, Portugal e Italia) suponen en conjunto el 42% del total de las importaciones en el mercado español.
Las exportaciones españolas alcanzaron un total de 6,7 millones de toneladas en 2006, lo que representa un incremento del 2,8% respecto de 2005, manteniéndose la concentración de las mismas en la Unión Europea, con un patrón similar al del resto de los sectores industriales españoles. Las exportaciones dirigidas a países terceros mantuvieron una evolución negativa, con una caída del 8% en volumen. EE.UU. y Turquía se mantienen como los destinos más importantes de las exportaciones españolas a países terceros.
EMPEORA EL SALDO COMERCIAL.
La evolución en valor de las exportaciones fue mucho más positiva por el efecto conjunto del valor añadido de los productos exportados y la fortaleza de los precios: 6.441 millones de euros, con un aumento del 17% respecto del año anterior.
El saldo comercial, en consecuencia, ha empeorado tanto en volumen como en valor. El volumen del saldo comercial en 2006 ha sido negativo en 7,5 millones de toneladas con un valor negativo de unos 1.850 millones de euros.
