Economía/Laboral.- Las mujeres españolas que cobran el salario mínimo duplica a los hombres, según un estudio de Adecco

Actualizado: martes, 10 julio 2007 13:53

Ellas trabajan principalmente en los servicios domésticos y de salud y ellos, en la construcción y las manufacturas


MADRID, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -

El 1,1% de las mujeres asalariadas españolas percibe el salario mínimo, el doble del número de hombres que reciben este mismo salario (0,6% del total), según el Euroíndice Laboral IESE-Adecco publicado hoy.

Entre los países analizados (la UE, Turquía y Estados Unidos), esta diferencia es proporcionalmente menor. Así, el 5,6% de las mujeres perciben este salario, frente al 4,4% de los hombres.

Además, la diferencia no depende del desarrollo económico del país, ya que, por ejemplo, una de las desigualdades más marcadas es la de Luxemburgo, que tiene el mayor porcentaje de mujeres cobrando el salario mínimo, el 17% del total (8,2% de los hombres), y sin embargo, cuenta con el salario mínimo más elevado (1.570 euros al mes).

El estudio de IESE-Adecco muestra que el sueldo mínimo en España se sitúa en 666 euros al mes (incluye la proporción correspondiente a dos pagas extraordinarias), menos de la mitad del salario mínimo en Luxemburgo (1.570 euros al mes), pero siete veces mayor que el búlgaro (92 euros), el país con la menor cifra.

Estas diferencias salariales tan grandes explican que España, con el noveno salario mínimo más bajo de los 22 países analizados, sea el país donde menos hombres perciben este salario y el segundo en el caso de las mujeres, tan sólo por detrás de Malta.

El estudio diferencia tres grupos de países: aquellos que tiene un salario mínimo por debajo de los 300 euros mensuales (todos los países del Este de Europa y Turquía), los que tienen un salario inferior a 700 euros (entre ellos España y Estados Unidos) y los que cuentan con un salario superior a 1.000 euros (Reino Unido y Francia, entre ellos).

EL SALARIO DE ESPAÑA IGUALA AL DE EE.UU.

Así, el salario mínimo español está prácticamente a la par que el griego y supera al de Portugal (en un 42%), al turco (lo duplica) y al de todos los países que se incorporaron a la UE en 2004 y 2007. Por el contrario, es sólo un 1% inferior al de Estados Unidos, pero se encuentra lejos de los demás socios comunitarios.

Igualando la capacidad adquisitiva del euro en todos los países analizados, el salario mínimo en España recorta diferencias cuando se compara con los países más ricos de la UE, pero al mismo tiempo, la ventaja respecto de los países más pobres de la UE se reduce de forma más marcada: el salario español es un 42% inferior al salario medio de los países más ricos, pero también un 10% inferior al de Malta.

En cuanto a la ocupación de las mujeres, en la UE éstas se concentran en pocos sectores: el 60,8% de ellas trabaja en seis sectores de los 62 existentes, frente al 41,9% de los hombres que se concentran en igual número de sectores. En concreto, ellas trabajan principalmente en salud y servicios sociales, servicio doméstico y educación, y ellos en la construcción, la minería y las manufacturas.

Comparando España con la media europea, el empleo femenino en el servicio doméstico tiene un mayor peso (su porcentaje es 3,6 veces mayor que la media de la UE), mientras que en la distribución sectorial del empleo masculino resalta la construcción (19,5%), que tiene la participación más elevada de la UE, cuya media es del 13%, con la única excepción de Grecia.

EN ESPAÑA BAJA LA TEMPORALIDAD.

Respecto a la tasa de temporalidad, la proporción de contratos temporales entre los países analizados continúa en la fase ascendente que se viene registrando desde 1998. En cambio, España ha sido el único país en el que esta tasa ha descendido y las previsiones indican que esta evolución se consolidará en los próximos meses.

Concretamente, según el estudio IESE-Adecco, España continuará reduciendo su temporalidad, hasta el 33,1%, mientras que la tasa media para los siete países europeos analizados (España, Portugal, Alemania, Italia, Francia, Reino Unido y Polonia) aumentará un 16,9%.

En cuanto a las previsiones de empleo, las estimaciones para el tercer trimestre indican una tenue moderación en Europa, donde crecerá un 1,5% interanual. Teniendo en cuenta que la población activa tendrá un comportamiento algo más dinámico que en trimestres anteriores, el grupo de desempleados se reducirá menos.

España tendrá el mismo comportamiento que el conjunto de países analizados, pero con un crecimiento del empleo del 3,1% en tasa interanual. En cambio, el grupo de personas sin empleo apenas se reducirá un 0,6% porque únicamente el 2% de las nuevas ocupaciones irá a manos de parados.

A pesar de la mala evolución de la ocupación juvenil hasta marzo, en el que todo el empleo ha ido a manos de adultos y se han destruido 1.000 empleos jóvenes, el estudio de IESE-Adecco indica que en septiembre, el empleo juvenil experimentará una recuperación debido, principalmente, al empuje de Alemania, donde el 54% de los nuevos empleos irá a parar a jóvenes y, en menor medida, de España, donde representarán el 4% de los nuevos puestos.

En los próximos meses, la tasa de desempleo tenderá a una estabilización en niveles similares a los actuales lo que, en términos interanuales, supone una reducción de siete décimas a nivel europeo, por lo que la tasa de paro se reducirá al 7,4% de media en la UE.

Por último, España mostrará reducciones en la tasa de paro menores que la media europea: una décima en el caso de los adultos sin empleo (supondrán un 6,8% del total) y nueve décimas en el de los jóvenes (el 16% del total).