Economía/Macro.- Fernández Ordóñez pide "cautela" para evitar las "políticas de alegrías" que acaben con el superávit

Actualizado: martes, 18 septiembre 2007 15:36

MADRID, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -

El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, pidió hoy "cautela y prudencia" en materia de gasto para evitar "políticas de alegrías" que puedan poner en peligro el superávit público.

Durante su comparecencia en la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso de los Diputados y en su turno de réplica, Fernández Ordóñez afirmó que es "capital" mantener el superávit cuando las cosas vayan "mal", dado que en momentos de menor crecimiento económico, estos excedentes "desaparecen automáticamente" dado el menor incremento de los ingresos.

"Cualquier tentación de hacer políticas de alegrías sería absolutamente contraproducente", advirtió Fernández Ordóñez, tras señalar que el aumento del gasto público genera además tensiones inflacionistas.

Las declaraciones de Fernández Ordóñez se producen precisamente en un momento en el que se ha generado una polémica entre el vicepresidente económico, Pedro Solbes, y algunos miembros del Gobierno sobre la idoneidad de determinadas prestaciones públicas que suponen un aumento del gasto público, relativas a vivienda, sanidad o políticas de natalidad.

Así, el gobernador indicó que gastarse el superávit público puede suponer en el futuro un incremento de impuestos, y apeló nuevamente a la necesidad de garantizar el superávit como un "tesoro".

"En materia presupuestaria, debemos mantener la política que en los últimos años ha sido tan positiva: generar superávit en los momentos buenos para poder tener menos problemas en los momentos malos", insistió el gobernador, quien reiteró que pretender, "a través de distintas propuestas", "enfrentar" el gasto, no es "prudente" en este momento.

En este sentido, alertó de que se puede caer en la tentación de pensar "que el superávit está ahí y, por tanto, hay que gastarlo", pero apuntó que el superávit está para aprovecharlo si en algún momento vienen "mal dadas". "Sin tener necesidad de tocarlo, él va a ir desapareciendo. Si uno tiene una desaceleración y la actividad es menor, los ingresos serán también menores de lo esperado", sostuvo.

"LENTA Y SUAVE" DESACELERACIÓN DEL PIB.

En cuanto a la evolución de la economía española, Fernández Ordóñez volvió a insistir en que el PIB iniciará una "lenta y suave" desaceleración, pero "no rápida", y reiteró que actualmente dispone de un "colchón" para afrontar la crisis hipotecaria como es el superávit y el crecimiento de la inversión productiva.

Además, dijo que el sector exterior "está empezando a ajustarse", al tiempo que la demanda interna está iniciando una moderación "apetecible" para la economía española, dado que no se puede estar creciendo indefinidamente a costa del consumo interno.

En materia de inflación, Fernández Ordóñez dijo que el objetivo "número uno" del Banco Central Europeo (BCE) es controlar los precios. "Haremos todo lo que sea necesario para mantener la inflación en el 2%. Eso no significa que no valoremos como está el euro y la economía norteamericana", añadió, tras insistir en que la inflación es "maligna".