Economía/Motor.- General Motors quiere negociar indemnizaciones pero no confirma oficialmente el cierre de Azambuja

Actualizado: viernes, 23 junio 2006 15:37

LISBOA, 23 Jun. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -

El anunció oficial del cierre de la fábrica de Opel de Azambuja, en Portugal, propiedad de General Motors (GM) sigue sin producirse, porque, según la empresa, "es sólo una posibilidad" y las negociaciones siguen abiertas.

Sin embargo, la multinacional envío una carta a los trabajadores informándoles que el próximo 31 de octubre la producción se trasladaba a la unidad de Zaragoza y que sería conveniente comenzar a negociar las posibles indemnizaciones.

La edición de hoy de 'Jornal de negocios' reproduce una carta enviada a los representantes sindicales de Opel Azambuja por el director ejecutivo de GM Europa, Gerald Johnson, en la que les confirma que mantienen su intención de trasladar la producción del Opel Combo a la fábrica de Zaragoza a partir del próximo 31 de octubre.

Además admite que será necesario comenzar a negociar las futuras indemnizaciones y compensaciones. "Consideramos prudente iniciar conversaciones con los representantes de los trabajadores sobre un programa de compensaciones justo y socialmente responsable para los empleados", admitió el responsable, que sin embargo también reconoce que aceptó "el pedido del gobierno para prorrogar la decisión final, para que éste tenga más tiempo para presentar alguna solución y superar la desventaja competitiva de 500 euros que supone producir el Combo en Azambuja".

Además, Johnson también resalta la importancia de iniciar los trabajos preparatorios necesarios para el cambio de producción para que pueda haber una respuesta rápida en el traslado en caso de que las negociaciones con el gobierno no tengan ningún efecto.

Ayer mismo, el ministro de Economía portugués, Manuel Pinho, aseguraba que el Gobierno no iba a financiar la producción de Opel, por lo que todo indica que la solución a la que aspira GM no cuenta con la aprobación del ejecutivo socialista, que además ya advirtió que exigirá a la multinacional estadounidense que devuelva todos los incentivos recibidos, alrededor de unos 30 millones de euros, por no cumplir el contrato social que tenía y que aseguraba la producción hasta 2009.

En el último punto de la misiva enviada a los trabajadores Gerald Johnson les aconseja que acaben con las huelgas y las manifestaciones. "Es importante que terminen con cualquier interrupción adicional del trabajo, en la medida en que eso solamente empeora la situación", advirtió.

A pesar de esa carta, hoy mismo el portavoz de GM Portugal, Nelson Oliveira, rechazó que la decisión de cerrar la fábrica sea definitiva e insistió en que "solamente es una posibilidad ya que las negociaciones se mantienen, tanto con los trabajadores como con el gobierno".

Sin embargo, confirmó que va a iniciarse la ronda de negociaciones con los trabajadores sobre las indemnizaciones, porque "estamos ante un escenario muy difícil y no nos podemos olvidar que la hipótesis del cierre está encima de la mesa", por eso dijo, "no podemos crear falsas expectativas y dejar a las personas desprevenidas", concluyó.