Sánchez Bruna defiende el derecho de los trabajadores a negociar sus reivindicaciones y cree que "no es justa la presión" que sufren
PAMPLONA, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
El comité de empresa de Volkswagen Navarra decidió hoy aplazar hasta mañana la elaboración del calendario de movilizaciones que llevará a cabo previsiblemente a partir de la próxima semana, ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo de convenio colectivo con la dirección de la empresa.
Los cinco sindicatos que conforman el comité adoptaron por unanimidad esta mañana la decisión de convocar paros y distintas manifestaciones para exigir a la compañía la negociación de sus reivindicaciones, principalmente en materia de flexibilidad, pero no concretarán hasta mañana su calendario de actuaciones, según informaron a Europa Press distintas fuentes sindicales.
Las conversaciones que mantuvieron esta mañana los sindicatos se produjeron después de que el viernes pasado la dirección de Volkswagen retirara su oferta de producir 10.000 coches adicionales en 2006, si las dos partes eran capaces de llegar a un acuerdo antes del 3 de marzo, cosa que no ocurrió.
PRESION Y MEDIACION DEL GOBIERNO.
En un comunicado remitido este mediodía a los medios, el sindicato UGT, mayoritario en el comité, consideró que "no es justa la presión mediática que se ejerce sobre la plantilla de Volkswagen Navarra y tampoco la responsabilidad que se exige al comité" de la factoría de Landaben.
El responsable de la sección sindical de UGT y presidente del comité de empresa, Jesús Sánchez Bruna, subrayó que los trabajadores "tienen derecho a reivindicar sus condiciones laborales y salariales" y recordó que la negociación del convenio afecta a 4.200 personas.
Sánchez Bruna afirmó que la central es consciente de que las decisiones del comité afectan a muchos otros trabajadores y empresas de Navarra cuya actividad laboral depende de la planta de Volkswagen. Señaló que por este motivo abogan por que la dirección garantice un proyecto industrial que aporte más volumen productivo y garantice la fabricación de un nuevo modelo como sustituto del actual Polo a partir del 2008, "para dar no sólo estabilidad a nuestra planta sino también al resto de empresas y que tenga una traducción positiva tanto económica como social para Navarra".
El presidente del comité afirmó que "nadie nos puede negar el derecho de negociar la reorganización de nuestra jornada, nuestras condiciones salariales y condiciones de trabajo en general", aunque entendió como "lógica la preocupación que existe entre los ciudadanos".
Según Jesús Sánchez Bruna, la responsabilidad de que el proceso se haya alargado durante más de un año no es ni de la representación sindical ni de la plantilla. Así, el sindicalista afirmó que la dirección, "durante mucho tiempo, nos estuvo negando el derecho a negociar y ha pasado todo un año, hasta que se nos dio la posibilidad de negociar otra flexibilidad diferente a la de los acuerdos del 2002, donde se nos descontaba parte de nuestro salario".
El presidente del comité reconoció que la dirección, en su última y definitiva propuesta, ya ha recogido parte de sus reivindicaciones, en la que acepta no aplicar descuentos salariales, recupera la cláusula de revisión e incrementos sobre el IPC entre otro aspectos, lo que lleva a "una aproximación que nos sitúa en la recta final de nuestra negociación, pero existen otros temas los cuales no compartimos y queremos que se clarifiquen".
Además, Sánchez Bruna apuntó que "para llegar a este punto fueron necesarios los paros, huelgas y movilizaciones que realizamos, y no descartamos que en los próximos días tengamos que llevar a cabo otras que se están discutiendo en el comité".
El responsable del sindicato mayoritario confió "en un pronto acuerdo" y quiso "tranquilizar a la opinión pública, pues en UGT siempre hemos ejercido nuestra gestión sindical con responsabilidad y lo vamos a seguir haciendo". "Históricamente hemos firmado todos los convenios y hemos llegado a acuerdos, aunque a veces no nos han gustado, y todo ello por esa responsabilidad que tuvimos en el pasado y que tenemos en la actualidad, y en base a ella somos los primeros interesados en no perder oportunidades de futuro", aseguró.
Por otra parte, Jesús Sánchez Bruna valoró positivamente el anuncio del presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz, sobre su intención de intermediar en el conflicto laboral para tratar de que las partes alcancen un acuerdo definitivo. No obstante, según dijo el dirigente sindical, el comité de Volkswagen Navarra "se ha enterado a través de los medios de comunicación de su propuesta mediadora"
Sánchez Bruna consideró que el Gobierno foral "debería pedir a nuestra dirección que continúe negociando aquellos aspectos en los que no existe aproximación" y apuntó que, "en cualquier caso, es la representación sindical la que junto con la dirección debe alcanzar un acuerdo". "La implicación y oferta mediadora del Gobierno deberá servir para obligar a sentarse y continuar negociando a las dos partes", señaló.
