MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, destacó hoy en el pleno del Senado que el desarrollo rural es una de las "principales preocupaciones" de su departamento, y avanzó que en 2008 contará por primera vez con un presupuesto consolidado de más de 9.000 millones de euros.
La ministra puntualizó que el crédito destinado este año para el conjunto de los programas de desarrollo rural se eleva a más de 740 millones de euros, lo que significa un crecimiento del 23%. No obstante, si se tiene en cuenta la aportación de la UE, el apoyo total se eleva a 1.540 millones de euros, un 34,8% más que en 2007, agregó.
En su respuesta al senador socialista Pedro Rodríguez Cantero, Espinosa incidió en que la aportación del Estado ha crecido un 10,3% para el próximo ejercicio, por encima del límite máximo del 6,7% fijado en el acuerdo de estabilidad.
Por otra parte, en materia de gestión de recursos hídricos se disponen de 217 millones de euros, lo que permitirá continuar modernizando regadíos y avanzar en el ahorro de agua.
Asimismo, destacó que figuran importantes partidas para la modernización de explotaciones e incorporaciones de jóvenes, la mejora de infraestructuras, la diversificación y apoyo a las medidas agroambientales y a las zonas de montaña.
Para optimizar la competitividad y calidad de las producciones agrícolas y ganaderas, así como la de la industria y la calidad alimentaria, Espinosa destacó que las dotaciones presupuestarias para 2008 superan los 400 millones de euros, un 34% más que al inicio de la Legislatura.
Se destinarán otros 185 millones de euros para mejorar la competitividad pesquera y la gestión de los recursos, e impulsar la pesca responsable y sostenible, las zonas marinas protegidas, el control y vigilancia de los recursos, buques de investigación y cooperación, así como la acuicultura y la innovación tecnológica.
Por otro lado, dijo que el Ministerio de Agricultura seguirá fomentando la política de seguros agrarios como mejor herramienta contra los riesgos climáticos, con 280 millones de euros para subvencionar las primas. El aumento del 33,2% en cuatro años es el mejor ejemplo del decidido apoyo a la política de aseguramiento, con el impulso al seguro de explotación, concluyó.
