El PSOE plantea mañana en el Congreso la posibilidad de abrir líneas de crédito para renovar autobuses

Autobús de Coslada
COSLADA
Actualizado: martes, 10 junio 2014 19:02


MADRID, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -

El PSOE propondrá este miércoles a la Comisión de Seguridad Vial del Congreso la posibilidad de pedir al Gobierno que abra líneas de crédito específicas para que los empresarios autónomos y empresas de transporte renueven su flota de autobuses y autocares, o al menos para que puedan instalar en ellos cinturones de seguridad que, en todo caso, deberían ser obligatorios para todos los vehículos en el nuevo Reglamento de Circulación.

La iniciativa socialista, que recoge Europa Press, recuerda que desde 2006 es obligatorio que los nuevos autobuses lleven instalados cinturones de seguridad, una medida insuficiente dado que aproximadamente el 40% de los autobuses que circulan por España se matricularon antes de la entrada en vigor de la norma, por lo que carecen de este dispositivo de seguridad.

De hecho, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, propuso que el nuevo Reglamento de Circulación, pendiente de elaboración, incluya una reducción del límite de velocidad para esos vehículos sin cinturón. Algo que el PSOE pide se complemente con la obligación de que todos los autobuses lleven cinturones, independientemente de su fecha de matriculación y con un periodo transitorio de dos años para permitir su adecuación.

AYUDAR CON CRÉDITOS BLANDOS

No obstante, conscientes de que "la instalación de cinturones supone un coste muy alto para las empresas" y de que la crisis económica no permite a muchas empresas acometer esta inversión, los socialistas proponen seguir la estela del Plan VIVE Autobuses 2009-10, que "permitió la renovación de 1.307 vehículos" gracias a 256 millones de euros en créditos blandos.

Por eso, proponen al Gobierno abrir líneas de crédito dirigidas a empresarios autónomos y empresas de transporte para financiar la renovación del parque o, en su caso, la instalación de cinturones de seguridad, tanto en microbuses como autobuses y autocares destinados al transporte urbano o interurbano de corto y largo recorrido, de transporte regular o discrecional y turístico para que, en un plazo máximo de dos años, todos los vehículos dedicados al transporte de viajeros los lleven instalados.