LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los controladores aéreos de Canarias mostraron hoy su total desconcierto ante la medida adoptada este viernes por el Gobierno, consistente en "imponer" a través de un decreto ley, de inmediata ejecución, la renovación de un convenio sectorial que se estaba discutiendo en una mesa de negociación, cuando todavía quedaban casi dos meses de posibilidades de diálogo, por lo que han asegurado que "hoy es un día triste para la democracia en España".
"Es realmente triste que un Gobierno democrático, bajo las siglas del PSOE, haya alimentado una campaña de desinformación y de alarma social sustentada en medias verdades y mentiras, con el premeditado objetivo de unilateralmente romper una mesa de negociación, como paso previo para imponer su criterio a través de un decreto ley, y todo esto a casi dos meses antes de que exista la posibilidad de llegar a un acuerdo debidamente consensuado entre las partes", indicó hoy la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) hoy en un comunicado.
De esta manera, los controladores canarios hicieron especial hincapié en que los trabajadores de este sector no han estado en huelga en las pasadas Navidades, tal y como "interesadamente" ha hecho creer el Ministerio.
Además, y pese a las programaciones realizadas por AENA para la Semana Santa, expusieron que los controladores iban a garantizar el servicio, tal y como ya anunciaron; "pero esta gran verdad que tranquiliza a la sociedad estaba molestando al Ministerio en su campaña pública de presentar a los controladores como privilegiados y dando a entender que es imposible llegar a un acuerdo con ellos, lo cual es totalmente falso".
"La verdadera realidad --continuaron-- de este asunto es que los aeropuertos españoles están operando con normalidad, que los problemas de congestión de las Navidades pasadas se debieron a una mala planificación de AENA, que ahora entendemos premeditada, con el fin de dejar sin turnos de controladores los días críticos de estas fechas, para luego utilizar como argumento falso que se debió a una huelga de los propios controladores, calentando a la opinión contra este sector para después justificar un decreto ley innecesario".
Así, manifestaron que lo único que ha conseguido el Gobierno es "doblegar" la voluntad de una mesa de negociación por la fuerza, "cuando todavía quedaba casi dos meses para el diálogo, y conseguir el camino de la privatización en los aeropuertos".
"Lo realmente curioso es el 'modus operandi' que empieza a instaurar un Gobierno, que en plena democracia prefiere imponer su criterio a través de la Ley, más que consensuar posturas en las mesas de diálogo, dada que la situación actual de normalidad en los aeropuertos españoles es pública y notoria, y no justifica medidas de fuerza", concluyó USCA.
