MADRID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
La organización no gubernamental Amnistía Internacional (AI) ha solicitado este miércoles a las autoridades de Singapur que no procedan a deportar a 53 trabajadores inmigrantes por su papel en los disturbios registrados el 8 de diciembre y ha pedido que se abra un proceso judicial justo y les sea concedido el derecho a apelar.
"Las autoridades están avanzando demasiado rápido. Estos hombres no deberían ser deportados arbitrariamente, ya que tienen derecho a un proceso correcto", ha dicho la subdirectora de AI para la región de Asia-Pacífico, Isabelle Arradon.
Los incidentes estallaron tras el atropello mortal de un inmigrante indio en el barrio de Little India, que degeneró en los peores disturbios registrados en el país en las últimas cuatro décadas. El Gobierno anunció el martes las deportaciones, así como procesos criminales contra otras 28 personas.
"Los acusados han de tener acceso a un abogado y se les ha de facilitar un intérprete, en caso de que sea necesario. Su derecho a un proceso correcto ha de ser respetado y, en caso de que algunos sean condenados, es crucial que su sentencia no incluya castigos físicos con varas, lo que es inhumano", ha agregado.
Así, Arradon ha indicado que "es importante recordar que los trabajadores extranjeros hacen frente a diversas formas de discriminación en Singapur". "No tienen la misma protección legal que los nacionales, y muchos trabajan en malas condiciones", ha apuntado.
A causa de ello, no se pueden beneficiar del derecho a la no discriminación ni disfrutan de libertad de expresión, asamblea y asociación, que son contemplados por la Constitución del país. "Estos disturbios han de ser un toque de atención para las autoridades. Las condiciones de los trabajadores inmigrantes han de mejorar, no desencadenar deportaciones arbitrarias", ha manifestado.
En este sentido, ha argüido que "una deportación en masa sin un proceso individual podría llevar a errores y la expulsión de personas inocentes". "Singapur ha de garantizar que se respetan los derechos de los trabajadores inmigrantes, que suponen alrededor de una cuarta parte de su población, en línea con el Derecho Internacional", ha remachado Arrandon.
