El CICR advierte de que en Costa de Marfil sigue habiendo inseguridad y se necesita mucha ayuda

French Soldiers Patrol In Abidjan
LUC GNAGO / REUTERS
Europa Press Sociedad
Actualizado: jueves, 14 abril 2011 20:36

MADRID, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha advertido este jueves de que en Costa de Marfil sigue habiendo inseguridad y la población necesita una gran cantidad de ayuda. En Abiyán, la principal ciudad del país, aún hay cadáveres en las calles y muchos heridos no están recibiendo atención médica.

Ante esta situación, el CICR y la Cruz Roja Marfileña ha vuelto a proporcionar ayuda de emergencia en Abiyán y han reforzado las labores de asistencia a la población, y en especial a las personas desplazadas, en el oeste y en otras partes del país, según un comunicado del CICR.

"Durante casi dos semanas hemos estado recibiendo diariamente cientos de llamadas de socorro", ha indicado el jefe de la delegación del CICR en Abiyán, Dominique Liengme.

El presidente saliente de Costa de Marfil, Laurent Gbagbo, fue detenido esta semana por fuerzas leales a su rival, Alassane Ouattara, reconocido por la comunidad internacional como presidente electo. Los partidarios de ambos políticos han mantenido duros enfrentamientos en el marco de la disputa surgida a raíz de las elecciones presidenciales del pasado 28 de noviembre.

Liengme ha dicho que "ahora la situación ha mejorado un poco", ya que "la gente ya va pudiendo obtener suministros, aunque no en toda la ciudad".

"Muchas personas heridas o enfermas no pueden ir al hospital debido a la inseguridad o porque no tienen manera de ir. Los centros médicos que están funcionando están saturados y les falta material y personal. En varias zonas de la ciudad, aún hay cadáveres en las calles", ha explicado.

En el oeste del país, muchas personas han muerto o resultado heridas en enfrentamientos, y miles de personas han tenido que abandonar sus hogares, según esta organización, que destaca la situación "especialmente grave" de Guiglo, Duékoué y Daloa y de la zona próxima a la frontera con Liberia.

Liengme ha añadido que "muchas casas, mercados y hospitales han sido saqueados o incluso destruidos" y que, dado que "sigue habiendo mucha tensión, podría surgir de nuevo la violencia".

Desde el pasado 13 de abril, el CICR ha proporcionado alimentos a más de 3.700 desplazadas que se encuentran en cuatro centros de acogida en Abiyán. Asimismo, este jueves ha enviado suministros médicos a varios hospitales de la ciudad.

GUIGLO, GAGNOA Y DUÉKOUÉ

En la ciudad de Guiglo (oeste), cuya población ha sufrido enfrentamientos y saqueos, el CICR y la Cruz Roja Marfileña empezaron a repartir suministros básicos en cinco centros de acogida a unas 7.000 personas desplazadas el 13 de abril.

Edmond Corthésy, responsable de las actividades humanitarias del CICR en la zona, ha señalado que "hay muchos hospitales y centros médicos que han dejado de funcionar a raíz de los recientes acontecimientos".

En el centro-oeste del país, el hospital de Gagnoa ha vuelto a funcionar gracias a que la Cruz Roja ha ofrecido una ambulancia, combustible, material médico y personal.

En los centros de acogida de Duékoué (oeste), aún hay decenas de miles de personas que han huido de la violencia. El CICR y la Cruz Roja Marfileña han construido una plataforma para dos tanques con 10.000 litros de capacidad ubicados en el hospital de la ciudad y en dos misiones --una católica y otra protestante--, han llevado agua para llenarlos y han instalado dos fuentes.

También están construyendo 20 letrinas y 20 duchas más y limpiando y desinfectando parte de la misión católica. En Guiglo han instalado 25 letrinas y 20 duchas para los desplazados y puesto cloro en diez pozos.

Un gran número de personas han sido arrestadas en los últimos días en relación con el conflicto armado. El CICR ha empezado a visitar a personas detenidas en Bouaké para ver cómo las tratan y en qué condiciones están.

Por otro lado, la organización ha indicado que los cerca de 130.000 refugiados marfileños que han tenido que salir del país desde el pasado diciembre han adoptado una actitud prudente: están pendientes de cómo evoluciona la situación en Costa de Marfil antes de decidir si vuelven.

Asimismo, el CICR y la Cruz Roja Marfileña siguen ayudando a los niños y a otros refugiados a restablecer el contacto con sus familiares de los que se han separado.

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