MADRID, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
La ONG Human Rights Watch (HRW) ha instado a la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea, Catherine Ashton, a mostrar públicamente su preocupación por la violación constante y persistente de los Derechos Humanos en China, durante su visita a Pekín los días 25 y 26 de abril.
"Como alto cargo de Exteriores de la UE, Ashton no puede ignorar el ambiente de deterioro de los Derechos Humanos en China", ha declarado el director para asuntos de la UE de HRW, Lotte Leicht. "Necesita convertirlo en una parte fundamental de su agenda en Pekín", ha afirmado.
Según la ONG, la Alta Representante podría instar también a los altos cargos del Gobierno chino a que dejen de vetar las acciones del Consejo de Seguridad de la ONU en Siria, entre las que se incluyen el acceso humanitario a la población civil necesitada.
En los últimos meses, la UE ha publicado férreos comunicados sobre el uso de la pena de muerte en China y sobre la crisis de inmolaciones en Tíbet, entre otros muchos problemas. La organización europea también proporciona apoyo a los defensores de los Derechos Humanos en el país asiático.
Sin embargo, la ONG considera que el compromiso de la UE con los Derechos Humanos en China es extremadamente débil desde que Ashton fue nombrada Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE.
"La voz de la UE necesita ser escuchada en relación con una amplia gama de problemas", ha expresado Leicht. "Desde el encarcelamiento del premio Nobel Liu Xiaobo hasta el apoyo del Gobierno chino al régimen sirio, a pesar de sus ataques contra la población civil", ha añadido.
Las más de 30 rondas de diálogo entre la UE y China sobre Derechos Humanos han tenido un efecto positivo poco perceptible entre aquellos que luchan por ellos en el país asiático. Según HRW, en otros niveles de diálogo político la UE ha fracasado a la hora de otorgarle a los Derechos Humanos y al Estado de Derecho la atención pública que se merecen, teniendo en cuenta la importancia de estos problemas en el país asiático.
A pesar de la promesa de junio de 2012 de los ministros de Exteriores de los países miembros de la UE de "abordar enérgicamente los problemas de Derechos Humanos en todas las formas apropiadas de diálogo bilateral, incluyendo al más alto nivel", la UE sigue siendo reacia a asegurarse de que las violaciones de dichos derechos son abordadas.
Un ejemplo de ello es que al aceptar el Premio Nobel de la Paz 2012 para la UE, ni el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, ni el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, mencionaron en su discurso de aceptación el nombre del laureado con el mismo premio en 2010, Liu Xiaobo, presumiblemente por miedo a irritar al Gobierno chino.
SIGUEN LOS ABUSOS PESE AL CAMBIO DE GOBIERNO
A pesar de que el nuevo liderazgo chino ha expresado su apoyo retórico a ciertas reformas en algunas asuntos claves relacionados con los Derechos Humanos, tales como la reeducación a través del trabajo, los abusos se siguen produciendo por todo el país. El Gobierno chino niega a su pueblo el pleno ejercicio de derechos básicos tales como la libertad de expresión, de asociación y de religión y reprime sistemáticamente a los disidentes y a los activistas pro DDHH.
"Ashton debería estar preparada para decirle a los interlocutores del Gobierno chino que hablan de la necesidad de reformas, que un buen punto de partida sería la liberación de Liu Xiaobo y el levantamiento del arresto domiciliario horrible y abusivo de (su mujer) Liu Xia", ha afirmado la responsable de HRW.
Liu Xiaobo está cumpliendo una pena de once años de prisión por "incitación a la subversión de los poderes estatales" y el acoso de las autoridades estatales a los activistas, se ha extendido también a los miembros de su familia.
"Las aspiraciones a los Derechos Humanos y al Estado de Derecho se han convertido en los temas principales en la China actual, y éstos deberían encontrarse en el núcleo de cualquier agenda diplomática", ha asegurado Leicht. "Ashton debe defenderlos encarecidamente por ser los valores sobre los cuales se construyó la UE", ha concluido.
