MADRID, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) calificó hoy de "irrisoria" la medida tomada ayer por el Gobierno israelí de supender durante tres horas al día la ofensiva militar en la Franja de Gaza para permitir el paso de ayuda humanitaria, ya que considera la operación "extremadamente violenta que afecta a la población civil de manera indiscriminada".
"Un millón y medio de palestinos en la Franja de Gaza, la mitad de los cuales son niños, están actualmente a la merced de las balas y los bombardeos incesantes", explica Franck Joncret, jefe de misión de MSF.
Por ello, se pregunta "quién podía creer que un ataque tan arrollador no afectaría a los civiles, sin posibilidad de huir y amontonado en este enclave extremamente poblado", donde en 13 días de ofensiva israelí han muerto ya más de 700 personas y cerca de 3.000 han resultado heridas.
Según MSF, la ofensiva militar "ha sembrado el terror en el seno de una población urbana atrapada y que no se atreve a salir de sus casas para recibir atención médica". Del mismo modo, la inseguridad golpea a los servicios de emergencia, afirma la ONG, ya que personal de ayuda humanitaria y de la salud palestinos han muerto, y hospitales y ambulancias han sido bombardeados.
Además, los servicios de urgencia de los hospitales están sobrecargados. Durante los diez primeros días, el hospital de referencia, Al Shifa, ha realizado más de 300 intervenciones quirúrgicas. "Los seis quirófanos del hospital funcionan al máximo de su capacidad, practicándose en cada uno dos opeaciones al mismo tiempo", asegura Cécile Barbou, coordinadora médica de MSF en Gaza.
De acuerdo con la organización, "los cirujanos palestinos y el personal médico están extenuados y apenas logran hacer frente a la llegada de los heridos", pues la mayoría de las urgencias que reciben son "heridos graves y politraumatizados, principalmente con heridas en el tórax, en el abdomen o en la cara".
ACTUACIÓN DE MSF
Los equipos de MSF presentes en Gaza, compuestos por tres expatriados y casi 70 palestinos, intentan desde el inicio de la ofensiva sostener las estructuras hospitalarias palestinas y atender a los heridos, y ya han distribuido material médico y medicamentos a varios hospitales que se están quedando sin medicamentos.
Un equipo de MSF compuesto por 20 personas ofrece atención médica a domicilio: cada día alrededor de 40 personas son atendidas directamente en sus casas. "El nivel de inseguridad es tan alto que nuestras posibilidades de desplazarnos y dar asistencia son extremadamente limitadas", explica Jessica Pourraz, responsable de las actividades de MSF en Gaza.
Respondiendo a la demanda de los médicos del hospital Al Shifa, MSF está enviando un equipo quirúrgico --un cirujano, un anestesista y una enfermera de quirófano--, un hospital móvil dotado de un quirófano y una unidad de cuidados intensivos, con el fin de aumentar la capacidad para atender heridos.
En estas circunstancias, y mientras continúan las restricciones de entrada de personal y de materiales en la Franja de Gaza, MSF considera que el paro temporal de los bombardeos puede que mejore el acceso de los heridos a la sanidad, los movimientos del personal humanitario y el aprovisionamiento en productos de primera necesidad, pero lo calificó como una medida "parcial" destinada a "calmar a la opinión pública internacional" y no tiene "efecto sobre la violencia directa y masiva que sufe la población".