JARTUM 5 Feb. (Reuters/EP) -
Cinco sudaneses fueron acusados formalmente hoy del asesinato de un cooperante estadounidense y su conductor en Jartum, delito que en país africano conlleva la pena de muerte.
Los cinco, entre los que figura un ex oficial del Ejército y el hijo de un conocido predicador islamista, están acusados del asesinato de John Granville, un empleado de 33 años de la Agencia Internacional Estadounidense para el Desarrollo (USAID, por sus siglas en inglés), y su conductor, Abdelrahman Abbas Rahama, de 39 años.
Granville y Rahama fueron abatidos a tiros mientras regresaban a casa de las celebraciones de Nochevieja en Jartum en la madrugada del 1 de enero de 2008.
Los acusados, de entre 20 y 30 años y vestidos con ropa islámica, se declararon hoy no culpables de asesinato, conspiración criminal y posesión de armas sin licencia en un tribunal del norte de Jartum. Cuando el juez leyó el cargo de asesinato, susceptible de ser castigado con la horca, ninguno de ellos reaccionó.
Los fiscales han argumentado el caso afirmando que los cinco son extremistas religiosos que habían decidido atacar a extranjeros en Sudán. Hoy fue la primera vez que el tribunal, que comenzó sus sesiones en agosto, escuchó los cargos formales y la declaración de los imputados.
En una sesión previa, uno de los imputados admitió en un mensaje de vídeo que suministró a los otros cuatro armas, pero negó saber nada de sus planes. Pese a ello, se enfrentará también al cargo de asesinato. La audiencia fue aplazada hasta el 16 de febrero cuando la defensa de los acusados presentará su alegato.