Actualizado 23/11/2009 20:12

Al menos un 53% de mujeres con problemas de drogadicción sufre además, violencia machista, según un estudio


MADRID, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -

Al menos un 53 por ciento de mujeres con problemas de drogadicción sufre, además, violencia machista sin que existan recursos asistenciales para atender su doble problemática de forma conjunta ya que cuentan con la misma raíz, según rebela un estudio de la Fundación Atenea.

El informe 'La atención a la problemática conjunta de drogodependencia y violencia de género en la población de mujeres', presentado hoy con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer que se celebrará el miércoles, asegura que el perfil de estas féminas está entre 21 y 40 años, soltera con hijos, iniciada en el consumo de alcohol y/o cocaína por su pareja y maltratada por esa misma persona durante más de siete años, sin pedir ayuda.

Así, explica que ante la presencia de una mujer con problemas de adicción se prioriza la situación que parece más alarmante, que es el consumo de sustancias, y se trabaja únicamente desde ese recurso, donde habitualmente se incide sólo en el control y la desintoxicación del consumo, sin indagar en las causas.

La Fundación Atenea asegura que el consumo activo impide que estén preparadas para tratar cuestiones más profundas como el maltrato pero, a su juicio, no quita para que posteriormente no se siga incidiendo en una terapia que tenga el género como eje central. "Cuando acontecen simultáneamente ambas situaciones no suele saberse qué recurso las debe atajar ni tampoco cómo hacerlo", apuntó la organización.

En esta línea, y a través de las conclusiones del estudio, esta institución propone que ambas redes trabajen de forma paralela y comprueben a qué se debe esa situación de consumo que, "en muchos casos, es consecuencia de una situación de violencia de género soterrada". Una segunda sugerencia sería la atención integral en los recursos residenciales de la red de drogodependencias a partir de su adecuación teniendo en cuenta la perspectiva de género.

Por otro lado, esta organización considera que los profesionales deben tener en cuenta que el número de mujeres que atienden no es el número real de mujeres que existen con estas problemáticas por lo que sería "fundamental" que existiera sensibilización desde las instituciones políticas gestoras de los recursos de atención, además de en los equipos profesionales técnicos.

Por tanto, Fundación Atenea reclama que se informe más a las mujeres para que ellas conozcan la atención que están recibiendo y desde qué servicios para, al mismo tiempo, hacerlas más partícipes del proceso y de alguna forma parte responsable de éste, "no sólo meras receptoras pasivas".