Dos años de prisión a un hombre que lanzó a su ex pareja contra la pared tras intentar reconciliarse con ella

SANTANDER 14 May. (EUROPA PRESS) -

El titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Santander ha condenado a dos años de prisión a un hombre que, de un empujón, lanzó contra una pared y tiró al suelo a su ex pareja, que tuvo que ser atendida en un hospital, después de intentar reconciliarse con ella.

Según recoge la sentencia, los hechos por los que ha sido condenado Vadim C, de 36 años de edad y de nacionalidad moldava, ocurrieron en la madrugada del 20 de noviembre de 2006.

La sentencia relata que sobre las 02,40 horas, el acusado esperó en la calle Rualasal de Santander a la salida del trabajo de su ex compañera sentimental, con intención de lograr la reconciliación.

Sin embargo, en el transcurso de la conversación se produjeron ciertas discrepancias y el acusado reaccionó de forma violenta y propinó a la mujer un fuerte empujón contra la pared, golpeándose ésta en la cabeza y cayendo al suelo.

Alertada una dotación policial, los agentes hallaron a la víctima tumbada en el suelo, por lo que la trasladaron al hospital Marqués de Valdecilla, donde la apreciaron edema en región palpebral derecha y hemicara derecha, que provocó lesiones consistentes en erosión en hemicara derecha, contusión en párpado derecho y herida inciso contusa en región parieto temporal en la que hubo de aplicársele grapas de sutura y posteriormente retirárselas.

Según consta en la sentencia, la víctima ha renunciado a las acciones penales y civiles que pudieran corresponderle y no ha solicitado orden de protección.

Por estos hechos, el juez ha condenado al acusado, como autor de un delito de violencia de género, en la modalidad de lesiones, a la pena de dos años de prisión; privación del derecho de tenencia y porte de armas durante dos años; y prohibición de acercarse a la víctima, o a su domicilio y lugar de trabajo durante dos años, así como de comunicarse con ella por cualquier medio o procedimiento durante tres.

La misma sentencia, que impone al acusado el pago de la totalidad de las costas causadas en el procedimiento, acuerda, que una vez sea firme el fallo, contra el que cabe recurso de apelación, se sustituya la pena privativa de libertad impuesta por la expulsión del condenado del territorio nacional y la prohibición de retornar al mismo en el plazo de diez años.