La ONU denuncia que las dos partes del conflicto en Sri Lanka pueden haber cometido crímenes de guerra

GINEBRA 13 Mar. (Reuters/EP) -

Las dos partes que luchan en el conflicto de Sri Lanka pueden haber cometido crímenes de guerra y deben detener el enfrentamiento para que puedan escapar los miles de civiles que permanecen atrapados, según afirmó hoy la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay.

Al alertar de que la pérdida de vidas puede alcanzar "niveles catastróficos", pidió al Gobierno y a los rebeldes Tigres de Liberación de la Tierra Tamil (LTTE) que suspendan las hostilidades para así permitir la evacuación de más de 180.000 civiles atrapados en la corta noreste.

Pillay también señaló que el Gobierno ha bombardeado en repetidas ocasiones las zonas designadas como "libres de enfrentamiento" para los civiles y también citó las informaciones que aseguran que los rebeldes retienen a los civiles para utilizarlos como escudos humanos y que disparaban a todos los que intentaban huir.

"Hay acciones ciertas que están siendo realizadas por el Ejército ceilandés y por el LTTE y que pueden constituir violaciones de los Derechos Humanos y del Derecho Humanitario Internacional", manifestó en un comunicado.

"El mundo es hoy más sensible a estas acciones, que podrían constituir crímenes de guerra y crímenes contra la Humanidad", añadió esta antigua abogada, que creció en una barriada pobre de la ciudad sudafricana de Durban como miembro de la minoría tamil en Sudáfrica.

El Ejército de Sri Lanka ha acorralado a los Tigres Tamiles en una zona de 37 kilómetros en la costa noroeste del país, y ahora lucha por terminar una guerra civil que comenzó en 1983. Pillay denunció que más de 2.800 civiles podrían haber sido asesinados y más de 7.000 heridos desde el pasado 20 de enero de acuerdo con una serie de fuentes creíbles. Muchos de ellos habrían estado dentro de las zonas libres de enfrentamiento.

También se cree que cientos de niños están entre los muertos. "El nivel actual de bajas civiles es impactante, y hay temores legítimos de que la pérdida de vidas humanas puede alcanzar niveles catastróficos, si el enfrentamiento sigue por el mismo camino", señaló la Alta Comisionada. "El tratamiento brutal e inhumano de los civiles a manos del LTTE es totalmente condenable y debería ser examinado para ver si constituye crímenes de guerra", añade su comunicado.