Publicado 19/03/2014 11:18

Soledad Becerril sobre inmigración: "Ni Italia ni España pueden abordar un problema de esta magnitud"

MADRID, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ha insistido este miércoles que la fuerte presión migratoria que sufre España y otros países del Mediterráneo es "un problema de la UE". En su opinión "ni Italia ni España puede abordar un problema humano, económico, social y de vigilancia de fronteras de esta magnitud".

Becerril, en una entrevista en Los Desayunos de TVE recogida por Europa Press, ha resaltado la necesidad de que la UE "esté a la altura" porque "el problema es de todo el sur de Europa". En cuanto a la colaboración con Marruecos, ha asegurado que "es buena pero no suficiente" y en su opinión el país magrebí necesitaría "cooperación y ayuda por los flujos y la presión que sufre desde Argelia y Mauritania"

Sobre la actuación de las fuerzas de seguridad, ha asegurado que "en general actúan correctamente y acorde a la legalidad", pero ha incidido en que en las últimas semanas "se han visto desbordadas". En cuanto al uso de pelotas de goma por parte de la Guardia Civil en Ceuta el pasado 6 de febrero, ha reiterado que considera que la actuación "fue legal pero no prudente".

Soledad Becerril se ha referido además a la situación de los centros de atención a inmigrantes (CETI) cuya ocupación, en el caso de Melilla, cuadriplica el número de plazas disponibles. "Están bien atendidos pero los educadores, los médicos, los enfermos y hasta los propios directores están desbordados", ha indicado Becerril.

POBREZA DE LAS FAMILIAS

Becerril se ha referido por otra parte a la situación de pobreza que atraviesan muchas familias españolas y ha recordado que el pasado verano comunidades autónomas tuvieron que poner en marcha programas para garantizar que los menores tuvieran "alimentación suficiente durante las vacaciones escolares". En su opinión, "va a haber que ampliar este tipo de programas y no sólo en vacaciones escolares, porque esta situación afecta a un número muy alto de familias".

En cuanto a las prioridades de la institución, la Defensora del Pueblo se ha fijado como objetivo que "las administraciones respondan con inmediatez y claridad" a los ciudadanos. "No vamos a poder resolver un problema económico, pero si consiguiéramos esto sería un avance democrático y de transparencia y lo vamos a intentar por todos los procedimientos legítimos", ha concluído Becerril.