SEVILLA 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
El director de la Estación Biológica de Doñana, Fernando Hiraldo, aseguró hoy que los 200 huevos de tortuga boba (Caretta caretta), procedentes de Cabo Verde, de los que 120 se han instalado en incubadoras en Sevilla y otros 80 han sido depositados en las playas de vírgenes de Cabo de Gata, en Almería, cuentan con todos los permisos legales de carácter internacional, desmintiendo así las declaraciones de Ecologistas en Acción que acusaba ayer a la Consejería de Medio Ambiente de haber cometido "irregularidades" en su traslado.
En declaraciones a Europa Press, Hiraldo apuntó que las críticas de los ecologistas siempre son necesarias, "por ser un colectivo que controla a la administración pública y vela por la seguridad del medio ambiente", si bien añadió que, en este caso, "están bastante equivocados, ya que el proyecto de restauración de anidación de tortugas marinas en el litoral andaluz sólo busca frenar la mortalidad de esta especie, que previsiblemente a largo plazo se extinguirá si no se toman medidas".
En esta línea, aseguró que el proyecto tiene un fundamento científico "bastante potente" y añadió que la Consejería de Medio Ambiente está actuando de "forma acertada" al buscar playas vírgenes en el litoral andaluz "donde sea factible la cría de estas tortugas".
Por su parte, el investigador de la Estación Biológica de Doñana y responsable del proyecto, Adolfo Marco, consideró un "total disparate" acusar a la Consejería de contrabando de estos huevos, "cuando todo se ha realizado con el mayor rigor posible". Además, insistió en que los ecologistas "lo saben perfectamente".
Al hilo de ello, aseguró, en declaraciones a Europa Press, que no existe ningún escrito de paralización de la suelta de tortugas que iba a realizarse el pasado 1 de octubre, tal y como aseguraron los ecologistas, sino que ésta se produjo "por problemas técnicos y cambios continuos de última hora debido a que estamos trabajando con una tecnología pionera en Europa".
Respecto a la liberalización de diez de los primeros ejemplares juveniles de tortuga boba que han sido criados en semicautividad durante este año en la Estación Biológica de Doñana (CSIC), en Sevilla, el responsable de este proyecto anunció que se producirá en otoño, "dependiendo de cómo evolucione la investigación".
De igual modo, Marco subrayó que este estudio de viabilidad de la reintroducción de esta especie se ha llevado a cabo "por un problema de muy grave conservación de esta especie autóctona y no exótica, como también han dicho los ecologistas, ya que desde hace muchos años hay en España anidaciones esporádicas de estos animales".
Finalmente, realizó un especial hincapié en que "en todo momento se ha trabajado con la máxima honestidad y prudencia por el bien del proyecto", asegurando también que "no se les ha realizado ningún daño a las tortugas". Así, según adelantó, de los 120 huevos que se instalaron en las incubadoras en Sevilla, el 98 por ciento se están desarrollando con éxito, al permanecer vivos un total de 118.