Greenpeace considera "absolutamente intolerables" los vertidos del río Saja-Besaya, el caso "más dramático" de Cantabria

SANTANDER, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

El responsable de la campaña de aguas de Greenpeace España, Julio Barea, afirmó hoy en Santander que los vertidos del río Saja-Besaya en la zona de Suances son "absolutamente intolerables" en el siglo XXI. En su opinión, este río constituye el caso "más dramático" de Cantabria en cuanto a vertidos.

Barea, que intervino en las III Jornadas Nacionales y I Internacional sobre Naturaleza y Medio Ambiente organizadas por la Guardia Civil de Cantabria, señaló que Greenpeace ya ha advertido en diferentes informes de que las fábricas de Sniace y Solvay en Torrelavega están vertiendo de forma "absolutamente descontrolada" al Saja-Besaya.

Una situación que consideró "gravísima" y sobre la que la organización ecologista está haciendo un seguimiento. Subrayó que el Saja-Besaya es un río "absolutamente muerto" y "cargado" de pasta de papel y otros contaminantes, y constituye "uno de los puntos más negros de Cantabria" en cuanto a vertidos de agua.

Barea recordó que en los recientes informes sobre la situación de las aguas en España elaborados por Greenpeace, la situación de la cuenca hidrográfica del Norte, a la que pertenece Cantabria, "no sale muy bien parada". Pero en general, todas las cuencas, excepto dos, sacaban una nota de "muy deficiente", porque ni siquiera llegaban al 25 por ciento de las aguas en buen estado ecológico, subrayó.

No obstante, reconoció que en los últimos años ha habido una "mejora" en el control de las aguas y se han construido bastantes instalaciones depuradoras, aunque en muchos casos "no funcionan todo lo bien" que deberían.

Según Barea, la situación está "mejorando" y tiene que seguir haciéndolo, ya que la directiva y las leyes europeas "nos obligan a ponernos las pilas". Además, la propia sociedad civil está "exigiendo" a las administraciones que "esto cambie", dijo.

SITUACIÓN DEL AGUA

En su intervención en las jornadas, el representante de Greenpeace pronunció una ponencia titulada 'El agua, su función ecológica. Perspectiva española', en la que abordó tres recientes informes de la organización sobre la calidad de las aguas en España.

Uno de ellos, elaborado en el año 2005, es de carácter general y está de "absoluta vigencia", según Barea, ya que la situación "no ha cambiado prácticamente en nada", incluso en algunos casos "ha empeorado". Los otros dos se refieren a las cuencas del Guadiana y del río Segura, este último "paradigma de una nefasta gestión del agua", denunció.

"O se cambia ese modelo de gestión, o estamos abocados a un colapso en cuanto a recursos hídricos" y a lo que éstos llevan asociado, advirtió.

En cuanto a la situación de las playas, señaló que según han puesto de manifiesto los científicos, España es uno de los países "más vulnerables" al cambio climático y, en el caso del Cantábrico, las expectativas sobre la subida del nivel del mar para el año 2050 es que va a ser "bastante más elevada" incluso que en el Mediterráneo, llegando hasta los 35 centímetros, lo que se traduce en "más de 35 metros de regresión de la costa", recalcó.