Un centenar de personas acude al acto organizado por la Asociación de Familiares de las víctimas cuatro años después del fuego
GUADALAJARA, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Familiares de algunos de los fallecidos en el incendio de Guadalajara, que hoy celebró un acto de recuerdo de la tragedia ocurrida en 2005, valoró y destacó la labor que está haciendo la justicia y criticó la reacción del Gobierno de Castilla-La Mancha por presionar a los jueces.
Alrededor de un centenar de personas asistieron al acto organizado por la Asociación para conmemorar el cuarto aniversario de sus muertes, que consistió en una concentración frente a la Delegación de Agricultura Y Medio Ambiente de Guadalajara, donde guardaron un minuto de silencio tras desplegar una gran pancarta donde podía leerse el lema "No nos olvidéis. Nos faltan once" y colocar once claveles blancos con el nombre de nueve de los fallecidos.
Una vez finalizada la concentración, el portavoz de las Asociación de Familiares, José María Manteca, en declaraciones a los medios, mostró su satisfacción por la labor que está haciendo la justicia y criticó las presiones que se están llevando a cabo desde la Junta contra los jueces "como si la región fuese el cortijo del señor Barreda donde hasta se permite el lujo de convocar un pleno para pedir a los jueces que imputen o levanten imputaciones según al señorito le convenga".
José María Manteca reconoció, por otra parte, que el autor del incendio fue el excursionista que encendió la barbacoa, ubicada junto a la Cueva de los Casares, pero quiso dejar claro que esa barbacoa "era totalmente legal y estaba habilitada para su utilización en ese momento y fue diez días después de la muerte de los once integrantes del retén de Cogolludo cuando se prohibió su uso".
El portavoz dijo que el fuego se podría haber generado por un rayo "e igual desde la Junta habrían imputado a Dios o a la naturaleza" y señaló que el problema no estaba ahí sino en las labores de extinción que corrieron a cargo de la empresa Tragsa "que está obligada a tener medios de seguridad, formar a los trabajadores y realizar protocolos de actuación que fallaron claramente con el resultado de once personas muertas".
EL DOLOR DE LAS FAMILIAS
José María Manteca se mostró especialmente indignado al recordar las intervenciones del consejero de Agricultura y Desarrollo Rural, José Luis Martínez Guijarro, defendiendo a los técnicos de la Junta "porque no tiene en cuenta el dolor de las familias y los problemas físicos y psicológicos que estamos padeciendo".
También insistió en conocer la verdad de los hechos y, en un tono muy exaltado, se quejó de las continuas referencias "de los políticos regionales" a que todo se hizo bien "cuando hubo 11 muertos y 13.000 hectáreas de pinos arrasadas". Según Manteca, es dudoso que se haya invertido en medios para extinguir incendios "porque se están llenado la boca con esas inversiones pero los trabajadores siguen manifestándose porque continúan en barracas tercermundistas y sin medios, mientras algunas empresas se están enriqueciendo".
Finalmente, Isabel Villaverde, madre de uno de los fallecidos, pidió la dimisión del presidente regional, José María Barreda, "porque el otro día le vi en televisión diciendo que lo que más le gustaba era la claridad y, sin embargo a nosotros no nos ha recibido nunca e, incluso, nos ha enviado a los GEO como si fuésemos terroristas". Según apuntó, "si tuviese decencia y vergüenza dimitiría porque ni tiene conciencia ni es un ser humano al olvidarse de nuestro dolor desde el primer día".
Esta tarde, a partir de las 20.00 horas, la Asociación de Familiares tiene previsto realizar una ofrenda floral, en la Rotonda del Reten de Cogolludo, ubicada en una de las entradas al Polígono de Viviendas de Aguas Vivas de la capital alcarreña, "para honrar a once héroes que dieron su vida trabajando en la extinción de un fuego que amenazaba con destruir buena parte de la provincia".
