SEVILLA, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
Miles de personas han participado en la manifestación convocada por COAG-Andalucía para poner de relieve el rechazo a los transgénicos, por los "problemas" que su uso acarrea al conjunto del sector agrario y reclamar una apuesta decidida de la Administración autonómica por la biodiversidad agrícola, la seguridad alimentaria de los consumidores y la soberanía alimentaria andaluza.
La manifestación ha arrancado en el puente de la Barqueta y ha concluido en los Jardines del Parlamento de Andalucía, donde los participantes se han concentrado mientras una delegación (formada por el secretario general de COAG, Miguel López, y portavoces de la PALT, Plataforma Rural, Unión de Consumidores, Amigos de la Tierra y Greenpeace), se reunía con los representantes de los grupos políticos de la Cámara.
El secretario general de COAG, Miguel López, ha destacado que el rechazo a los transgénicos tiene fundamentos "económicos, agronómicos, ambientales, de mercado y de salud de los consumidores". "Es paradójico que mientras nuestra miel sufre el bloqueo en Europa porque se han hallado restos de transgénicos, las multinacionales como Bayer o Monsanto quieran proponernos que cultivemos más transgénicos y los dispersemos por nuestros campos", ha dicho López.
"Hay 20 de los 27 países de la UE que rechazan los organismos genéticamente modificados (OGM) y los consumidores, mayoritariamente, también los rechazan. Después de lo que ha pasado con la miel, ¿cómo evitaremos que pueda haber contaminación en otros sectores estratégicos como el aceite o las frutas y hortalizas?", ha subrayado.
Además, asegura que la normativa europea autoriza a los estados miembros a "tomar las medidas necesarias para evitar la presencia de OGMs en otros productos", incluyendo "la prohibición del cultivo de OGMs en amplios territorios". A su juicio, la libertad de producir transgénicos elimina la libertad de otros a producir sin transgénicos, por lo que el Estado Español puede y debe paralizar el cultivo de OGMs y apostar por unos productos agrícolas y ganaderos diferenciados, sin OGMs, dirigidos a nuestros consumidores y a los mercados europeos de calidad.
Por ello, ha destacado que los productores andaluces llevan "mucho tiempo trabajando para adaptarse a las demandas de la UE y alcanzar producciones más respetuosas con el medio ambiente" y ha puesto de ejemplo el algodón, cuya superficie se cultiva de forma mayoritaria en producción integrada.
Asimismo, ha recordado que una parte importante de la producción agraria andaluza va dirigida al mercado centroeuropeo, avalada por su gran calidad, orientación que puede verse "muy perjudicada por la presencia de OGM" en el territorio por el rechazo de los consumidores europeos a estos productos.
"Los OGM son una opción innecesaria y peligrosa que supone un paso atrás y un obstáculo en el camino emprendido por el sector agrario y que no resuelve sus problema, sino que contribuye a crear otros: caída de la renta, aparición de nuevas plagas, fortalecimiento de plagas secundarias, transferencia de la resistencia a herbicidas totales a las malas hierbas, destrucción de la biodiversidad con la creación de 'desiertos verdes'", ha concluido.
