Actualizado 07/11/2007 14:34

Los universitarios españoles reconocen el problema del cambio climático pero no están implicados "emocionalmente"

MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los universitarios españoles reconocen el problema del cambio climático pero no están implicados "emocionalmente" con él, lo que puede limitar sus actitudes para mitigarlo. Así se desprende de una encuesta a 315 jóvenes de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), que recoge el informe de UGT sobre 'Transporte, Calidad del Aire, Siniestralidad y Cambio Climático'.

Los datos revelan que el medio ambiente es un valor medio entre otros seleccionados por los estudiantes, como la igualdad, la paz, la justicia y la tolerancia, que se sitúan por delante, así como el reconocimiento, la riqueza, la autoridad o el poder, que se sitúan por debajo.

En todo caso, estos jóvenes asocian la protección del medio ambiente al hecho de ser tolerante, con ideas diferentes y lejos de valores relacionados con el éxito material y el dinero. Ahora bien, en cuanto a las medidas que toman para mitigar, por ejemplo, los efectos del cambio climático, un 28,8 por ciento reconoce que utiliza el coche para ir a la facultad con alguna frecuencia, a pesar de que mayoritariamente conocen el daño medioambiental que implica.

Además, conocen las consecuencias catastróficas de este fenómeno y asociación diferentes emociones a él: miedo, culpa y vergüenza y algo de esperanza. En todo caso, los autores destacan que estas emociones negativas se sienten de forma moderada, lo que confirmaría que conscientes a nivel racional, el cambio climático no les preocupa a nivel emocional.

Las consecuencias de esta implicación se reflejan en el uso del coche. Así, aunque reconocen el efecto que el uso del coche privado puede tener en el deterioro medioambiental, no se sienten culpables cuando lo utilizan. "Esta falta de efecto sobre las emociones puede estar reduciendo la respuesta práctica de las estrategias de protección ambiental", añaden.

Por carreras universitarias, los jóvenes que creen con mayor seguridad en las consecuencias negativas del cambio climático son los de Psicopedagogía y Magisterio, seguidos de los de Ciencias Ambientales y Psicología, frente a los estudiantes de Geografía e Informática, que tienen menos seguridad en las consecuencias negativas. También son los primeros los que muestran más sentimientos de culpabilidad y los encuentran más ventajas en el uso del transporte público.

El informe de UGT, presentado durante unas jornadas sobre movilidad, recuerda que el uso particular del automóvil representa casi el 10 por ciento de las emisiones españolas de gases de efecto invernadero. El sindicato plantea una nueva cultura de la movilidad mediante mensajes a la sociedad, preparación de las infraestructuras urbanas, disponibilidad de transporte colectivo, fiscalidad verde y uso inteligente del automóvil.

La secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente, Dolors Hernández, pidió al Gobierno que se comprometa a poner en marcha una Ley de Movilidad. El director general de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio de Medio Ambiente, Jaime Alexandre, que también participó en la jornada aseguró en este sentido que la legislación ambiental supone una mejora de la competitividad.