MADRID, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
Economistas y sindicatos coincidieron hoy en señalar que el coste de las medidas dirigidas a reducir los gases de efecto invernadero y el cambio climático es "rentable", en el marco de unas jornadas organizadas por el Instituto Europeo de Salud y Bienestar, con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente.
Ramón Tamames, catedrático de estructura económica señaló que si la comunidad internacional se plantea una reducción de estos gases, de manera acelerada, a partir de 2015, "el coste sería el equivalente al 3 por ciento global del PIB mundial que se genere entre los años 2015 y el 2030". Esto supondría el 0,2 por ciento de cada PIB anual a lo largo de ese periodo.
Tamames coincide con el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático que "será mejor actuar a ese bajo coste previsto, en vez de incurrir en el desastre de la inacción para intentar controlar la situación cuando sea demasiado tarde, con gastos inconmensurables y sin ningún resultado efectivo".
"Lo realmente caro es no hacer nada porque al final llegaremos a situaciones desastrosas con un coste muchísimo mayor que el de la prevención", subrayó Tamames. De hecho, informes internacionales avisan de que de no acometerse ninguna acción, el PIB global podría caer hasta un 20 por ciento.
Respecto a la situación en España, Tamames considera que las empresas están comprometidas en la medida en que las condiciona el Ministerio. No obstante, considera que "todavía hay muchas emisiones difusas no controladas, especialmente en el sector transporte".
En la misma línea, la responsable del Área Confederal de Medio Ambiente de UGT, Natividad Hernando, señaló que aunque las emisiones de las empresas no son las que más pesan en la lucha contra el cambio climático, "sí tienen un papel muy importante". En este sentido, recomendó a las empresas ajustar sus procesos productivos a criterios de ecoeficiencia y producción limpia, utilizando las mejores técnicas disponibles.
Por su parte, el secretario confederal de Medio Ambiente y Salud Laboral de CCOO, Joaquín Nieto, afirmó que "el gran desafío" que tienen las empresas españolas es transformar sus productos y procesos en otros con menos emisiones, adaptados a las energías renovables. Según dijo, el efecto invernadero ya está pasando "una factura altísima" puesto que se estima que en España "cada año mueren prematuramente 15.000 personas por la contaminación en las ciudades".
