Actualizado 07/08/2007 16:27

Ecologistas en Acción y Greenpeace convocan para el sábado una marcha para exigir el cierre de la central de Garoña

BURGOS, 7 Ago. (EUROPA PRESSS) -

Ecologistas en Acción y Greenpeace hicieron esta mañana un llamamiento a la ciudadanía para colaborar en la marcha que ambas organizaciones encabezarán este fin de semana para pedir el cierre inmediato de la central nuclear de Garoña (Burgos). Lo que se pretende es que el Gobierno central cumpla su compromiso de sustituir la energía nuclear por energías mas limpias antes de las próximas elecciones.

La marcha convocada para este sábado comenzará a las seis de la tarde en la localidad burgalesas de Barcina Barco y terminará en las instalaciones de la central nuclear de Santa Maria de Garoña, donde ecologistas en Acción, Greenpeace y quienes se sumen a la marcha exigirán una vez mas su cierre, así como la presentación de un plan para poner punto y final a las demás nucleares.

El responsable de la campaña antinuclear de Greenpeace, Carlos Bravo, recordó esta mañana el anuncio que lanzó el Gobierno Central, en boca de la Vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, el pasado 10 de enero sobre el cierre de Garoña e insistió que el "cumplimiento de ese compromiso" es el objetivo de la marcha.

Las organizaciones ecologistas insistieron en que el funcionamiento peligroso de la central nuclear de Garoña, debido al agotamiento de su vida útil y sus graves problemas de seguridad, son las razones a las que se agarran para pedir su cierre.

Según dijeron, conviene recordar que Garoña sufre problemas de agrietamiento múltiple por corrosión que afecta a los componentes internos de la vasija del reactor, así como graves fallos en su cultura de seguridad además de un negativo impacto medioambiental, social y económico, ya que devalúa los recursos agrícolas ganaderos y naturales de su entorno

En este sentido, Bravo se refirió al informe que a petición de la organización ecológica que representa realizó el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) el 21 de mayo del año 2003, en el que se pone de manifiesto el empeoramiento del estado de la vasija.

Tanto Ecologistas en Acción como Greenpeace, incidieron también en la escasa aportación de Garoña a la red eléctrica con menos de un 1,4 % del total, lo que hace aun mas fácil "prescindir de esta obsoleta instalación".