Consuelo Rumí asume que el buen tiempo traerá en verano pateras en condiciones "lamentables"
ARANJUEZ (MADRID), 18 (EUROPA PRESS)
La secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, se refirió también a la situación de los menores extranjeros no acompañados en España y avanzó que el Gobierno priorizará la agilización de los 800 expedientes pendientes en Andalucía, frente a otras reclamaciones como la del Ejecutivo ceutí.
"Empezamos con unas prioridades, con una situación como la que tiene ahora mismo Andalucía, y después continuaremos buscando soluciones que den respuesta a situaciones que tienen además un añadido complejo", dijo en relación a las reclamaciones realizadas por el Gobierno ceutí que asegura no poder asumir los 100 expedientes pendientes de estos menores.
Antes de participar en Aranjuez (Madrid) en el seminario 'Integración y Solidaridad en la Cohesión Social', de los Cursos de Verano de la Universidad Rey Juan Carlos, Rumí declaró a los medios que la pasada semana tuvo lugar en Toledo la IX Reunión Hispano-Marroquí sobre inmigración donde se acordó intensificar la lucha contra las mafias especializadas en el tráfico de menores extranjeros, agilizar la tramitación de los expedientes ya culminados por parte de los consulados marroquíes en España, y agilizar las reagrupaciones familiares.
En este sentido, subrayó que España y Marruecos han iniciado un proceso de reactivación del tema de menores no acompañados en el que la colaboración del país magrebí no sólo es "magnífica" sino que va a ser "aún mejor".
De otro lado, apuntó que el buen tiempo estival y el deseo de las mafias de seguir haciendo negocio hará que este verano lleguen algunas pateras en condiciones lamentables, como el cayuco que ayer arribó a la orilla de Canarias con 67 personas y el cadáver de otro inmigrantes clandestinos.
PATERAS EN VERANO
"Entramos en una fase donde las condiciones climatológicas y, sin lugar a dudas, el lucro que obtienen los traficantes, va a poner de manifiesto que alguna patera va a llegar y en condiciones muy lamentables".
En todo caso, insistió en el descenso en la llegada de embarcaciones, aunque puso de manifiesto que las rutas utilizadas son más peligrosas. "Nos encontramos con situaciones tan trágicas como que llegue una persona muerta, pero lo que es una realidad también es una llegada menor", insistió.
El mensaje que lanzó a las mafias es que el Ejecutivo va a "continuar luchando con todas las contundencia contra el tráfico de personas". "Vamos a luchar por erradicar ese tráfico porque es un viaje donde, además de una aventura incierta, tiene un final, donde lamentablemente a veces es trágico, y siempre sin éxito porque retornarán antes o después en los países de origen", añadió.
NO HAY NECESIDAD DE PROCESOS DE REGULARIZACIÓN
Rumí también insistió en las palabras del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero en México, en relación a que no va a haber más procesos de normalización en España. "No va a haber otro proceso de regularización porque no es necesario -reiteró--. Hace tres años, cuando llegamos al Gobierno, nos encontramos con un número muy importante de personas que estaban en España trabajando en la economía sumergida. Tuvimos que tomar una decisión consensuada, había que dar una respuesta a una situación terrible, que había cientos de miles de personas trabajando en la economía sumergida".
Esta situación, según comentó, ya no se da ahora porque hay una norma que regula los movimientos migratorios, las situaciones de ámbito excepcional. Así, durante su intervención, Rumí recordó que el pasado año llegaron a España más de 200.000 inmigrantes por la vía de la contratación en origen, frente a los 30.000 que lo hicieron a través de 'cayucos' o 'pateras'.
Finalmente, Rumí defendió el refuerzo en el control y la lucha contra la inmigración irregular, los acuerdos bilaterales y multilaterales, así como la acción conjunta de la UE para enfrentar un fenómeno global, y la puesta en marcha de una política de integración que busca la cohesión social y la igualdad para todos los ciudadanos que viven en España, y no para dar privilegios a los extranjeros.